8 similitudes entre la cultura mexicana y la india que seguramente desconoces

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1. La chancla y el rodillo para amasar

Todos (o una gran mayoría de) los mexicanos tienen el recuerdo de haber vivido la clásica amenaza de “te voy a dar con la chancla” cuando hacían alguna travesura o simplemente colmaban la paciencia de sus mamás. En India, la mayoría de los niños recordarán haber pasado por esta misma situación, sólo que en vez de ser amenazados con una chancla… eran perseguidos por sus mamás con el rodillo para amasar.

2. Las bodas

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Alrededor del mundo las bodas se celebran de muchas formas. En algunas culturas las bodas son celebraciones íntimas sólo con la familia cercana… en otras solo existe la celebración religiosa y no la fiesta. Hay lugares en el mundo en donde no dan de cenar y beber, y los invitados tienen que pagar lo que consumen. Sin embargo, tanto en México como en India las bodas son celebraciones enormes en donde se invita a absolutamente toda la familia, los amigos de la familia y los amigos de los novios. No se trata simplemente de la unión de dos personas, sino de la unión de dos familias.

En ambos paises, la celebración como tal dura sólo un día, ¡pero qué día! Está repleto de rituales o tradiciones. En la India, por ejemplo, se pintan las manos con henna y los novios reciben joyas como regalos. En México, por su parte, a los novios se les une con un lazo y se les regalan arras. ¡Los presupuestos para estas bodas son enormes! Se gastan enormes cantidades de dinero en los vestidos y decoraciones, y todo mundo gozará de un banquete gratis y barra libre.

3. La relación con la familia

En muchas culturas se acostumbra que los hijos se vayan de casa al empezar la Universidad. Sin embargo, en estas dos culturas lo común es que los hijos vivan en casa hasta que decidan casarse y empezar una familia propia, se muden a otro país o tengan un sueldo lo suficientemente alto como para comprar o rentar una casa propia. El estereotipo de la madre mexicana y de la madre india es de mujeres devotas a sus hijos, mujeres que dedican su vida a cuidar de ellos.

En ambas culturas, la opinión de la madre es de suma importancia en todo sentido, desde quienes son amigos de los hijos, hasta la persona con la que terminarán pasando el resto de su vida.

4. Las tradiciones textiles

Ambos países cuentan con tradiciones textiles que han estado presentes por cientos de años. India se ha caracterizado en la industria de la moda por sus telas de alta calidad, en especial el algodón y la seda, al igual que por la presencia de complejos estampados (como los mandalas).

En México, por otra parte, los textiles se caracterizan por ser hechos en telares manuales y presentar diseños indígenas repletos de flores y tradición mexicana. Además de los textiles, Jajmau en India y León en México son ciudades en las que la producción de objetos de piel es inmensa y de costos muy bajos.

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5. La cantidad de deidades existentes (y su presencia en la mitología cotidiana)

La mayor parte de la población en México es católica, mientras que en India se practica el hinduismo. Sin embargo, ambos países comparten la creencia en figuras divinas con influencia de las fuerzas naturales, cuyo propósito es la protección. Tales figuras están acompañadas de leyendas que se han contado de generación en generación, y que actualmente se enseñan en las escuelas como parte de la historia del país.

Sólo por poner un ejemplo: en México existe Quetzalcóatl, uno de los dioses creadores y responsable del florecimiento de las artes, y en la India existe Sarasvati, una de las tres diosas principales encargada del conocimiento.

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6. Las celebraciones del inicio de primavera

En ambas culturas existen antiguas tradiciones -reconocidas alrededor del mundo- que se llevan a cabo cada año para celebrar el equinoccio o inicio de la primavera. En México, se acostumbra visitar las pirámides de Teotihuacan en ropa blanca el 21 de marzo, con el propósito de atraer luz y buena vibra para el año. En India se celebra el festival de colores Holi, a finales de febrero o mediados de marzo. Este festival tiene como propósito ahuyentar los malos espíritus y darle bienvenida a la luz y al amor.

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7. Amor por las especias y el picante

Bueno, quizás este sea un dato bastante conocido… pero igualmente es digno de mención.

En la mayor parte de los países, comer con mucho picante parece un deporte extremo, de alto riesgo para el paladar. En cambio, los mexicanos y los indios entenderá el amor hacia las especias y el picante (junto a vietnamitas, tailandeses y coreanos). Para los mexicanos y los indios, la comida no tiene el mismo “chiste” si no pica. No hay nada mejor que enchilarte y aún así no poder parar de comer sólo por querer disfrutar del sabor. Entre más picante la comida, el sabor es mucho mejor.

8. El arte de voltear la tortilla con la mano

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En ambas culturas, la comida es excepcional y el aprender a cocinarla es todo un arte. Las recetas son pasadas de generación en generación, así como las tradicionales y raras técnicas.

Un ejemplo de esto es que en ambas culturas se acostumbra cocinar directo al fuego y así como los mexicanos voltean las tortillas con la mano, en la India voltean el “naan”. Adicionalmente, en ambas culturas se tiene la costumbre de acompañar la comida con algún tipo de masa. En la comida mexicana abunda el maíz mientras que los indios prefieren la harina.