Dinos que somos de “Fachadolid”.
A los vallisoletanos no nos hace nada de gracia que nos pongan esta etiqueta. Como gastes esta broma a una persona que acabas de conocer, ya la puedes invitar a muchas cañas para que te perdone.
Comenta que el Ribera de Duero no está mal, pero que hay vinos mejores.
El Ribera de Duero es nuestro tesoro gastronómico. Salvo que seas de La Rioja, cuyos vinos son los únicos que pueden mirar a los ojos de nuestro Ribera de Duero, no se te ocurra decir que otras Denominaciones de Origen son mejores. Seguramente te responderemos: “No está mal ese vino. Aquí lo usamos mucho para hacer Calimocho”.