1. Biblioteca Pública de Salt Lake City – Salt Lake City, EE.UU
Con música que suena en todos los pisos, una galería de arte, su política de no censurar ningún contenido de Internet en sus computadoras públicas, y una cafetería que sirve café y bocadillos, definitivamente no es ésta la biblioteca con la que crecí, ni en la que me decían “Shhhh” de vez en cuando.