EL NIÑATO.
Es más listo que ninguno, divertido como pocos pero, ¡anda! Tiene 30 años y aún sigue en la universidad. Todavía vive en casa de sus padres o en un piso de estudiantes cuyos gastos sufragan sus progenitores. Su máxima aspiración en la vida es salir de fiesta hasta que el cuerpo aguante. El niñato no ha crecido ni tienen intención de hacerlo. Pondrá una y mil excusas para no hacerse mayor. Es ideal si quieres vivir atrapada en el tiempo, será un lastre si lo que buscas es un futuro en común, por muy majo que sea.