El sao o saus es un plato de origen afroantillano en el cual la estrella son las patitas de cerdo. Marinadas en mucho limón, cebolla, pepino y un toque de ají chombo, este abreboca que se disfruta mejor con las manos, es un plato ganador en las fiestas panameñas. Hay quien dice que su sabor ácido y picante puede resultar adictivo.
2. Ceviche
Foto de la autora
No importa si es de corvina, de camarones, de pulpo o combinación, un buen ceviche acompañado con galletas de sal, una cerveza bien fría y entre amigos es un clásico de los panameños.
Esta sopa a base de pollo, ñame y culantro, es uno de los platillos típicos de nuestra gastronomía, muy eficaz para “revivir muertos” después de una noche de fiesta. A veces espeso y otras más bien aguado, el verdadero secreto del sancocho panameño está en el culantro.
4. Pesca’o frito con patacones
Foto de la autora
¿Caribe o Pacífico? Sin importar en qué costa te encuentres, un buen pescado frito con su limoncito y acompañado de esas deliciosas rodajas de plátano verde, te dejará chupándote los dedos.
Estas “empanaditas” de yuca rellenas de carne molida son una de las tantas delicias fritas de Panamá. Recién hechas y acompañadas de una buena taza de café humeante y un par de rebanadas de queso prensado, son una deliciosa forma de empezar el día.
Parar de camino al interior en este sitio a comerse una empanada de queso (o dos) es una tradición sagrada de generaciones para muchos panameños. La mejor forma de acompañarlas es con un vaso de leche agria o uno de chicheme.
7. Chicheme
Foto: Carlos Ho Diéguez
Esta deliciosa bebida dulce a base de maíz y leche se toma bien fría y es uno de los mejores remedios para paliar los estragos del calor en nuestro istmo tropical. Se dice que los mejores chichemes de Panamá los preparan en La Chorrera, en la provincia de Panamá Oeste.
8. Pan de la Arena
Foto de la autora
En forma de rosquitas, moñitos o palitos, este pan compacto, saladito y dorado es la delicia de quienes visitan La Arena de Chitré en la provincia de Herrera.
Rojo, morado o de maracuyá, con “buco” leche condensada y su extra de malteada, este postre escarchado es el mejor remedio para combatir el calor en una tarde de paseo. Ahh, y si viene en su conito de papel, ¡mejor aún!
Admitámoslo, el nance es una de esas frutas que no gusta a todo el mundo, pero cuando te agrada, sabrás que uno de los mejores postres que existe es una buena pesada de nance. Hay quienes la comen caliente, otros la prefieren fría, pero en cualquiera de los dos casos el colofón lo pone un buen puñado de queso blanco panameño desmenuzado encima.