1. No nos hables de manera directa.
Es cierto que el mexicano tiene fama de cantinflear y darle vuelta a las cosas con tal de no parecer grosero o descortés. Pues Sonora es la excepción a esta regla. Al sonorense le gusta que le digan la neta. Si no te gusta algo, dilo, si te gusta, también. Si estás de acuerdo o si no, mejor expresarlo, nadie se va a enojar sino todo lo contrario. Pocas cosas nos molestan más que el hecho de que alguien nos diga una cosa y acabe haciendo otra. ¡Sinceridad ante todo!