Photo: Galicia Sustentable

10 peligros que corres al visitar Puebla

by Juan Pablo Mazorra 19 Aug 2017

1. Querrás visitar todas sus iglesias.

Tal vez piensas “pero qué mochos los poblanos” y no te atrae la idea de pasearte por iglesias, pero una vez que conoces La Catedral o subes a la Iglesia de los Remedios, te entran las ganas de conocer más templos gracias a la belleza arquitectónica que guardan en su interior.

2. Te darás cuenta de que te falta probar mucho de la gastronomía mexicana.

Notarás que jamás habías probado un verdadero mole o un auténtico chile en nogada como los de Puebla. Te faltarán días para probar las chalupas, las pelonas, los molotes, las memelas, el chile atole, los camotes, tlacoyos… pensarás “¿Por qué soy mexicano y jamás había comido todo esto?”

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3. Abandonarás tu estilo de vida minimalista.

¿Y cómo no? Después de probar platillos que llevan más de veinte ingredientes y mirar la arquitectura llena de adornos en el Centro Histórico, te será casi imposible regresar a tus gustos anti-barrocos.

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4. Descubrirás que no conocías las verdaderas quesadillas.

Porque aquí todas llevan queso. Preocúpate por lo verdaderamente importante: ¿La quieres con chicharrón, flor de calabaza, champiñones, chorizo, frijoles? Si yo fuera tú, las probaría todas.

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5. Vas a querer rentar depa en el Centro Histórico.

Considerado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1987; cuenta con más de 2160 monumentos históricos; su diseño lo hace ideal para caminar sin perderse y siempre tener sombra. Es un verdadero placer conocer cada callejón y rincón de tan emblemático lugar. En fin, comenzarás a poner atención a los letreros de “se renta” y te lo pensarás seriamente.

6. Te entrarán unas terribles ganas de casarte.

Una vez que estés parado frente a la Capilla del Rosario tendrás por siempre una idea en la cabeza: “Aquí me tengo que casar”.

7. Necesitarás un camping.

Basta con que visites uno de los nueve Pueblos Mágicos para decidir que necesitas comprarte un camping, recorrerlos todos y vivir ahí un buen tiempo.

8. Te saldrá el espíritu aventurero.

Y es que en Puebla hay muchos lugares para escalar, navegar en rápidos ríos, nadar en bellas lagunas, saltar en prominentes cascadas, hacer increíbles excursiones por bosques o llegar a la punta de un volcán.

9. Inevitablemente te dará cruda.

¿Un Rompope? ¿Una pasita? ¿Una visita nocturna a Cholula? ¿Una cervecita en Los Sapos? ¿Vamos a bailar a la Juárez?… son tantos los planes de fiesta que será mejor que te prepares, pero no te preocupes porque…

10. La cruda ya no será pretexto para no hacer nada.

No hace falta empezar a sentirse mal para comenzar con los remedios. Por aquí termina la fiesta y Puebla ya te ofrece cientos de opciones para alimentarte, restaurantes y food trucks que abren toda la noche. Comer algo bien picosito antes de ir a dormir es la mejor receta para evitar la desagradable cruda.

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