En algún momento acabarás excesivamente caracterizado.
Si eres extranjero y estás en México durante las fiestas patrias, ¡no te salvarás de esto! Todo comienza con un sello tricolor en la mejilla y de ahí escalará rápidamente a un bigote postizo, trenzas y un sombrero gigante con el típico “¡Viva México, cabrones!”. Probablemente también acabes bañado en confeti, serpentinas, cerveza y esa espuma en aerosol que a la gente tanto le encanta.