Los tópicos son algo que describe y define. Destacan lo más común de ciertas cosas, personas y/o lugares. Pero claro, algunos de estos las personas los llevamos como estigmas grabados a fuego en la frente cuando en realidad, a veces, son una imagen que no nos corresponde. Y eso nos pasa a los almerienses: que a veces estas creencias sobre nosotros son falsas y a veces la mentira es solo a medias.
1. Somos muy directos para quedar con alguien que no vemos desde hace mucho tiempo
Quizás sea por no herir sentimientos, por no quedar mal, por no crear falsas expectativas o por todo a la vez, pero sí es cierto que para quedar con alguien que no hemos visto en mucho tiempo, damos muchas vueltas. Esto se traduce en: «pues ya si eso te aviso», «a ver si quedamos para tomar un café o unas cervezas» o «bueno, pues ya si eso te doy el toque». Cuando escuches esto, ten por seguro que de forma delicada te están diciendo que no te van a llamar ni quieren quedar contigo, por lo menos en principio.
2. Alardeamos del buen tiempo
Bueno, esto es una mentira a medias. Sí alardeamos del buen tiempo, sobre todo, con los de fuera, pero entre nosotros hay que reconocer que también nos quejamos muchísimo del calor, de la humedad, del viento, del bochorno propio de vivir a orillas del mar o de la sequedad que sufren aquellos que viven en el interior cuyo clima es semidesértico. En este aspecto somos un poco inconformistas.
3. Somos muy fans de David Bisbal
Esta es otra mentira a medias. Si eres de fuera y se te ocurre hacer tu propia investigación sobre el número de almerienses que siguen a David Bisbal, entre las respuestas encontrarás de todo, pero, sobre todo, tus estadísticas seguramente tendrán un resultado de 50% pro-Bisbal y 50% anti-Bisbal. Que sí, que estamos muy orgullosos de él, pero tiene que haber de todo en este mundo y los almerienses no íbamos a ser menos.
4. Somos muy folklóricos
Otro estigma con el que nos señalan con el dedo cuando decimos que somos de Almería, por ser de Andalucía. A ver, que sí, que también nos gustan las fiestas populares con sus trajes regionales y todos los demás complementos folklóricos, pero sólo a unos cuantos. Al resto de los almerienses nos gusta más mirar de lejos, o simplemente no mirar y no tener nada que ver con el vestido de faralaes, traje de flamenca o vestido de sevillanas —llámalo como quieras— ni nos gusta ir a las romerías montados en carros de caballos. Las castañuelas ya si eso para otra ocasión y los coros con cánticos venerando a la Virgen o a Dios mejor los dejamos para los profesionales, no vayamos a liarla.
5. Siempre estamos de fiesta
Sí, nos gusta una jarana más que a un niño un caramelo, pero esta también es una verdad a medias, ya que no siempre estamos de fiesta. Que nos guste no quiere decir que todos los fines de semana estemos liándola: también tenemos otros quehaceres, no siempre nos llega el presupuesto y en otras ocasiones preferimos pasar largas temporadas en casa cual oso hibernando. Eso sí, salir a tomarnos una cervecica fresquita cada vez que podemos, incluso entre semana, eso no nos lo quita nadie, pero de tranqui ¿eh?
6. Todos los días nos echamos la siesta
Otro tópico por ser del sur. Pues no, amigos, aún los horarios laborales no nos los han limitado hasta mediodía nada más para que tengamos la tarde libre para echarnos la siesta por ser del sur. ¿Quizás deberíamos solicitarlo en la empresa para corroborar este tópico? Emoticono pensando.
7. No sabemos hablar
Esto no solo es mentira, sino que nos molesta bastante. Una cosa es que tengamos vocabulario y acento propio y otra cosa es que no sepamos hablar. Por supuesto que hablamos bien, el problema viene también porque hablamos muy rápido, nos comemos las eses finales, incluso letras o terminaciones, y abrimos mucho la boca remarcando las vocales. Pero todo es cuestión de afinar el oído y de acostumbrarse.
8. Si no cumplimos estrictamente con los estereotipos andaluces es porque no lo somos
Pues sí, a más de un almeriense nos lo han preguntado, sobre todo, la gente de fuera. Por qué no bailamos flamenco, por qué, a muchos, no nos gustan los carnavales, o cuál es nuestra cofradía o hermandad, entre otras muchas costumbres populares, dudando de que nuestras raíces sean cien por cien almerienses cuando no tenemos respuesta.
9. Somos muy graciosos y tenemos mucho arte contando chistes
Otro tópico del sur. Reconocemos que el humor almeriense es muy peculiar, pero sabed que el arte de contar chistes no siempre es una de nuestras mejores habilidades.
10. En Almería solo hay plástico
Sí, se ve desde el espacio la mancha de plástico de nuestros invernaderos de poniente, pero que seamos el mayor número de productores europeos en frutas y hortalizas no quiere decir que Almería no tenga más encantos. Este es un tópico que tenemos muy arraigado y del cual nos sentimos muy orgullosos, pero no todo es plástico en esta tierra. ¡Daos una vuelta por toda la provincia!
11. Siempre estamos en la playa
Ojalá fuera posible, pero, como ya dijimos, nuestro clima a veces nos juega malas pasadas y el viento es lo que más predomina, indistintamente, ponientazo y levantazo. Lo de que el dios Eolo es un enamorado de Almería, ya lo tenemos asumido.