Arizona es un lugar como ningún otro: aquí se encuentran dos de los desiertos más importantes de Estados Unidos — el desierto de Chihuahua y el de Sonora — así como lagos, montañas, cavernas e incluso pequeñas islas en el río Colorado. Toda esta diversidad geológica hace que Arizona sea el lugar perfecto para vacacionar. Desde brillantes cavernas subterráneas hasta una de las presas más altas del mundo, estas son doce de las atracciones que todos deberían conocer en su primera visita a Arizona.
1. El Gran Cañón
Considerado una de las siete maravillas naturales del mundo, el Gran Cañón es una barranca de 450 kilómetros de longitud que el flujo del río Colorado ha ido esculpiendo en el terreno. La profundidad promedio del cañón es de 1,6 kilómetros y en ciertos lugares tiene una extensión de hasta 28 kilómetros de un lado al otro. Los visitantes pueden bajar a pie por el cañón y caminar a lo largo del río o contratar el servicio de mulas para hacer el recorrido. Al oeste del Gran Cañón se encuentra el “Skywalk”, un puente de cristal que te permite estar de pie a 1200 metros sobre el río Colorado. El costo es un poco elevado, pero vale la pena por una vista que no encontrarás en otro lugar. Si le tienes miedo a las alturas, tal vez te quieras ahorrar esta parte.
2. La Presa Hoover
Con 220 metros de altura, esta presa fue considerada la más alta de su tipo (arco-gravedad) cuando fue construida en la década de los treinta. Aunque ya no mantiene ese récord, la Presa Hoover sigue siendo una hazaña de la ingeniería moderna. Su labor es convertir el agua del río Colorado en electricidad, a través de una planta de poder que se encuentra abierta al público. Puedes tomar un tour al interior de la presa y maravillarte ante los dos enormes generadores de turbinas de 2,4 megavatios, los cuales generan cuatro mil millones de kilovatios-hora cada año. Si te estás preguntando cuánto es eso, es muchísimo, ¡suficiente para proveer de electricidad a una ciudad de más de un millón de personas durante todo el año!
3. Jardín Botánico del Desierto
Desde plantas de aloe hasta saguaros gigantescos, las plantas del desierto son tanto hermosas como impresionantes. Localizado entre Phoenix y Tempe, muy cerca del Aeropuerto Internacional Sky Harbor, el jardín público más grande de la ciudad fue fundado en la década de los treinta por botánicos entusiastas, enfocados en darle un hogar incluso a las plantas desérticas más espinosas. Desde entonces, el Jardín Botánico del Desierto ha crecido hasta alcanzar más de 56 hectáreas, con cinco senderos naturales, exhibiciones de arte y un pabellón estacional de mariposas.
4. El Museo de Instrumentos Musicales
Existen instrumentos raros y existen cosas como el octobass: diseñado a mediados del siglo XIX, este bajo monumental mide casi tres metros y medio de alto y es uno de los instrumentos más extraños que podrás encontrar en el Musical Instrument Museum (MIM). El MIM es una de las principales atracciones para los visitantes de Phoenix y tiene una de las colecciones de instrumentos musicales más importantes del mundo. ¡Hay más de 6500 piezas en exhibición! No te vayas sin visitar el área de celebridades, donde encontrarás memorabilia de Tito Puente, Johnny Cash, Taylor Swift y muchos otros.
5. Cavernas Kartchner
Batman estaría celoso. Con múltiples salones, 3.8 kilómetros de pasadizos y una estalactita tan alta como un edificio de cinco pisos, el Parque Estatal Cavernas Kartchner hace que la Baticueva parezca un juego de niños. Hay dos tours disponibles para todas las edades, cada uno con un recorrido de menos de un kilómetro y una duración de entre hora y media y dos horas. El paisaje de la caverna es surrealista, con columnas ancestrales de piedra caliza rodeándote en todo momento. Es increíble pensar que todo esto es consecuencia de agua que se ha ido filtrando en la tierra por millones de años.
6. La ruta 66
El legendario pianista y cantante estadounidense Nat King Cole (así como los Rolling Stones y John Mayer) hizo famosa esta autopista con su canción “Get Your Kicks on Route 66”. La legendaria ruta se extiende por 3495 kilómetros, ocho estados y tres husos horarios, y anteriormente se consideraba una de las carreteras más solitarias para los viajeros del suroeste de Estados Unidos. Arizona cuenta con el tramo más largo de esta famosa carretera y aquí podrás encontrar extrañas ventanas al pasado como el Wigwam Motel en Holbrook, con sus habitaciones en forma de tipi.
7. Meteor Crater
Gracias a Luis Álvarez y su hijo, el geólogo Walter Álvarez, sabemos que un meteorito que impactó la península de Yucatán fue el responsable de la extinción de los dinosaurios hace más de sesenta millones de años. Tal vez este cráter no tenga un pedigree tan impresionante, pero la caminata para explorarlo sí lo es. Ubicado 56 kilómetros al este de Flagstaff en el norte de Arizona, este gigantesco cráter mide más de un kilómetro y medio de un extremo a otro. No está permitido entrar en el cráter, pero hay muchas rutas que permiten recorrer los alrededores y tener vistas impresionantes de su interior.
8. Tombstone
En los días del salvaje oeste, la ciudad de Tombstone era un lugar de pistoleros y forajidos. El tiroteo de O.K. Corral — el duelo más famoso de la historia de Estados Unidos — tuvo lugar aquí en 1881 y muchos de los forajidos más famosos del viejo oeste están enterrados en el Cementerio Boot Hill de Tombstone. Actualmente, la ciudad rinde honor a su historia con representaciones diarias del tiroteo y muchas de las tabernas y teatros de antaño han sido recreadas para deleite de los visitantes.
9. Sedona
Esta ciudad hippie tiene bases muy sólidas. Famosa por sus acantilados de piedra roja e impresionantes bosques de pinos, Sedona es hogar de muchos artistas atraídos por la belleza natural y quietud del lugar. Algunos de las actividades más populares son las caminatas a Cathedral Rock, Coffee Pot y a la capilla de la Santa Cruz, una parroquia católica construida en la cima de una colina con materiales de los alrededores. Aquí te encontrarás con una multitud de adivinos preparados para leer tu fortuna y muchas más tiendas de cristales y artículos metafísicos. Se dice que la ciudad posee puntos de alta energía (vórtices) con poderes místicos.
10. Biosfera 2
A principios de los noventa y cerca de Tucson, un grupo de científicos diseñó un ecosistema contenido dentro de un domo gigante de cristal. Añadieron plantas, animales, sistemas de ventilación, personas y cerraron las puertas con la esperanza de que todo saliera bien. No fue así. Lamentablemente, los animales empezaron a morir cuando los niveles de oxígeno disminuyeron y el experimento tuvo que ser cancelado. Biosfera 2 fue posteriormente adquirido por la Universidad de Arizona y se convirtió en un centro de investigación. Actualmente, un tour por el domo te transportará a través de siete ecosistemas distintos, jardines experimentales y otras exhibiciones científicas.
11. El Observatorio Lowell
Flagstaff fue denominada como la primera Ciudad de Cielo Oscuro (International Dark Sky Community) en 2001, lo que significa que las condiciones de luz son favorables para la observación del cielo nocturno. Pero para ver la mayor cantidad de estrellas posibles, basta con acercarte al Observatorio Lowell. Las instalaciones del observatorio incluyen un centro de visitantes, un planetario y varias plataformas para la observación del cielo nocturno, sin olvidar la visita al telescopio del Discovery Channel, una instalación de 53 millones de dólares.
12. Cañón del Antílope
Si eres un fotógrafo o estás obsesionado con las selfies en paisajes bonitos, este icónico lugar no puede faltar en tu lista. Se trata de un cañón ondulante donde la luz se refleja en tonos violetas y naranjas, dándole al lugar un aspecto único. No hay otra manera de decirlo, el cañón del Antílope es un lugar mágico. Nota: El cañón se localiza en territorio navajo y un guía es necesario para llegar hasta aquí.