1. Sabes que en las calles de Querétaro nunca falta el ¡ánimo!
Típico, te encuentras en el coche, con el peor mood del mundo y crees que tu día no puede empeorar más. De pronto, de la nada escuchas un “¡ÁNIMO!”, seguido de una orquesta de claxons y más gritos. Igual sigues en el tráfico, pero de pronto el día no parece tan horrible y hasta tienes una sonrisa en la cara.