La salchicha en el pan es verdaderamente triste. En México los hot dogs tiene ensalada, tocino, zanahorias y nunca deben de faltar los chilitos en escabeche. Ah y las papas fritas de nuestros hot dogs son del tamaño normal (en Argentina ponen las papas pay, bien finitas), y van a un costadito, no encima…
Los mexicanos estamos acostumbrados a hablar con los derivados de la palabra chingar y madre. Lo que para los argentinos es el cosito para nosotros es esa chingadera o esa madre. No sé por qué no nos entienden si en los dos países hablamos en español. ¡Me rindo! ¡Chingada madreeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!
No hay nada más bizarro que presentar en sociedad por primera vez a un alfajor. Si bien es delicioso, cada vez que viene otro mexicano y le das a probar uno te salen con que es muy similar al mamut… ¿Tú qué crees?
¡Estamos mal acostumbrados! En México en cada esquina podrás encontrar una gran variedad de antojitos mexicanos: torterías y taquerías que se encuentran para satisfacer nuestros antojos a todas horas. En Argentina, sin embargo, esto no es común y la oferta de comida callejera se limita a las hamburguesas, los panchos y a los choripanes.
Puede que en México pasaran días sin que comieras tacos, pero sales del país y es una necesidad que no te deja dormir. Esa sensación de antojo te pone los pelos de punta. La respuesta es sí: Hay un gran número de rinconcitos mexicanos en donde te puedes ir a echar tus “tacuaches”.
Un argentino sin fernet es como un mexicano sin tequila. Esta es una bebida tradicional que es el protagonista principal a la hora de festejar bodas, 15 años, buenas noticias, reuniones con los amigos… ¡siempre debe de haber un tequilita!
Si en el país te quieren vender un aguacate en cinco pesos y te enojas, prepárate para llorar pues de ahora en adelante en Argentina verás cómo crece el valor conforme pasan el día, el mes y los años… ¡Será un lujo de ahora en adelante volver a ver en tu mesa un guacamole!
¡Las provisiones! Quedarse sin suministros es la pesadilla de cualquiera y es que llegar a Argentina y no saber dónde comprar productos mexicanos es como si estuvieras dentro de una pesadilla. Pero no te preocupes: Sí hay de todo si lo sabes buscar…
Vas a ver cómo el Obelisco se convierte en tu referencia para saber que vas en la dirección correcta. ¿Ya lo viviste?
Estamos acostumbrados a un menú navideño calientito y la idea de festejar la Navidad en verano es muy rara para el mexicano. Pero vale la pena acostumbrarse al riquísimo vitel toné, al helado de postre y a brindar con una sidra o un champagne helados.
El recuerdo de una cervecita acompañada por unos nachos con queso se queda en tu mente… acá no lo vas a vivir jamás. El fútbol es una pasión que se ha salido de las manos y por seguridad ya no se venden bebidas alcohólicas dentro de la cancha.
Prepárate para que cada vez que hables les recuerdes a todos los argentinos los doblajes de sus películas favoritas, o qué tal esas novelas que trascendieron por acá y que en México solo veía tu abuelita… ¡Acostúmbrate carnal!
En Argentina los mariachis son argenmex, güeritos y de ojos verdes. Pero el amor por México es el mismo: adoran los tacos, el tequila, a nuestra música y a nuestra gente. Algunos integrantes del mariachi sí son mexicanos, pero los demás son argentinos enamoradísimos de nuestra cultura.