13 frases sin sentido a las que los chilangos sabemos responder perfectamente
1. Se dice: “Nomás les encargo que le vayan pasando para atrás en doble fila… ”
Lo que hay que hacer:
Contorsionarse como actor del Circo Atayde sobre el pasillo del microbús para que otras cinco personas ocupen tu lugar, en un desafío frontal a las leyes de la física clásica. También puedes no hacer nada y ser un agente más del caos citadino… La decisión es tuya.
2. Se dice: “¿Vas a querer tus tacos con copia?”
Lo que hay que hacer:
Hay que hacer un análisis de la economía personal, del hambre que se tiene y de la taquería en la que estamos ubicados. Si la taquería es buena, la patria es pobre y el hambre está canija, pedir doble tortilla es imperativo. Si la taquería es más bien chafona, el hambre sigue siendo considerable y el varo no es limitante, mejor búscate unos tacos más chidos y pídelos con copia.
3. Se dice: “Coche negro oscuro, oríllese a la orilla… ”
Lo que hay que hacer:
Resignarse.
4. Se dice: “Viene, viene, viene, todo, todo, todo… ”
Lo que hay que hacer:
Aflojar cincuenta varos o mentar madres con determinación y enjundia… y buscar otro lugar para estacionarse.
5. Se dice: “¿Cuántas combinadas fueron?”
Lo que la doña de las quecas quiso decir fue:
¿Cuántas de tus quesadillas fueron con queso?
6. Se dice: “Espérate, se va a poner bueno… ”
Lo que hay que hacer:
Irse. La experiencia nos ha enseñado que esta es la reina de las promesas vacías.
7. Se dice: “Ya me quedan puros de papa, joven… ”
Lo que se responde:
“Bueeeno… muchas gracias”. Después, se baja la vista en actitud resignada y se emprende la búsqueda de una nueva bici de tacos.
8. Se dice: “Nos vemos abajo del reloj”.
Lo que hay que hacer:
Averiguar a qué estación del Metro se refiere nuestro interlocutor. Una vez hecho esto, hay que dirigirse a dicha estación y descender del metro. Esperar.
Lo que NO hay que hacer:
Salirse de la estación del Metro y preguntarle a todo el mundo por el paradero del susodicho reloj. Uno de cada dos fuereños comete este error en su primera cita de Metro. No seas ese fuereño.
9. Se dice: “A ver de a cómo nos toca…”
Lo que se responde:
“Pus a ver…” Se recomienda entrar en actitud defensiva de forma inmediata.
10. Se dice: “¿La cuba va a ser campechana?”
Lo que se responde:
Indicar al joven la adecuada proporción de ingredientes que van a conformar nuestra bebida de nombre caribeño. Respuestas igualmente crípticas, pero aceptables, son: “nada más pintadita” o “micha y micha”.
11. Se dice: “Ahí va el diablo… ”
Lo que hay que hacer:
¡Quitarse!
12. Se dice: “¿Cuándo te toca hoy no circula?”
Lo que hay que hacer:
Recordar si tienes o no coche, luego checar el color del engomado (o la terminación de las placas para coches de provincias lejanas), echarle un ojo al IMECA y ver si hay o no hay contingencia.
13. Se dice: “¿Va a ser verde o roja?”
Lo que hay que hacer:
Elegir el tipo de salsa que más nos guste o el tipo de gasolina que exijan las especificaciones del coche. Ojo, cuando hablamos de gasolina normalmente decimos “¡De la verde!”, ya sea para indicar que queremos gasolina sin plomo o para expresar nuestra sorpresa por lo cara que está.