1. Tienes una excelente concepción del espacio…
¡Del espacio que debería medir un carril si al menos estuviera pintado! Es común que te encuentres grandes tramos en avenidas importantes en las cuales los carriles desaparecen de forma súbita. No importa, todos nos los imaginamos claramente y la libramos.
2. Siempre que llegas a un alto pones el índice de la mano derecha sobre el volante en modalidad de negativa rotunda.
Sabes que debes estar listo con esta señal universal y muy atento ante cualquier persona que se acerque a tu coche con la intención de darle una manita de gato a tu parabrisas.