Atreverse a dar el primer paso para viajar en solitario es un momentazo de la vida para cualquiera que viaja. No obstante, es una realidad que, siendo mujer, todos esos miedos, esas dudas, esas imágenes de violencia, caos y destrucción que pasan por la mente se acentúan. Todo es por partida doble.
Pero nada hay que eche para atrás en sus propósitos a un auténtico espíritu wanderlust, sea hombre o mujer. Se trata de aplicar algunos consejos y trucos para que algunas situaciones sean mucho más fáciles de llevar.