1.
Se te enchina la piel cada vez que cantas “Caminos de Guanajuato” mientras tomas un tequila, orgulloso de tu tierra y con la emoción a flor de piel.
2.
Saludas a todo el mundo, aún a los desconocidos.
3.
Nunca consideraste comprar varios pares de chanclas en un solo día… hasta que visitaste la Plaza de Zapato de León.
4.
Sabes que hay pocas cosas mejores que tomarte el día libre para disfrutar de una caminata por el centro de Dolores Hidalgo y rematar la tarde con un helado riquísimo… de un sabor extrañísimo.