Pensabas que era un eslogan como tantos otros, pero no. Es un saludo, un agradecimiento, una sonrisa, un estilo de vida y un ejemplo a seguir.
2. El español tico
Foto: Dana Ptacinsky
Desde el ubicuo “mae” al “qué dicha” o “por dicha” pasando por el maravilloso “con gusto” que responde a un “gracias”, hay mil y una expresiones ticas que deleitan el oído y se contagian rápidamente.
Si visitas el país para el momento del final de liga y tienes la suerte de que se juegue el clásico, busca un bar o un restaurante donde haya ambiente (todos pasarán el partido) y deja que algún tico te cuente la historia de esta rivalidad mientras te tomas una Imperial fresquita.
5. El despertador natural (y tropical)
Foto: Tiago Palhota
Es difícil acostumbrarse otra vez al sonido monótono de un reloj despertador cuando durante los últimos días te has despertado con monos, iguanas o aves que se pasean por el techo de tu habitación…
6. Los batidos
Foto: Tiago Palhota
Las decisiones más difíciles que hay que tomar en Costa Rica: ¿banana y fresa o mango, maracuyá y piña…? ¿Con agua o con leche? Batidos así no existen en ningún otro lado.
7. Los casados
Foto: Dana Ptacinsky
Es verdad que llega un momento en que se pueden hacer repetitivos, pero en cuanto dejas atrás Costa Rica, ¡te mueres por uno de estos platos tan alegres!
Es muy posible que nunca hayas visto hacer así el café antes de pasar por CR y es más que probable que te lleves uno a casa y trates de emular la emoción de prepararte el café al estilo costarricense, con 1820 o Rey, por supuesto.
9. Los 10.000 colones
Foto: Dana Ptacinsky
El billete más hermoso del mundo, sin duda alguna.
10. Los patacones
Foto: Dana Ptacinsky
Buscarás la receta e intentarás encontrar el equivalente del plátano costarricense en tu país de residencia, pero nunca tendrá el sabor de los patacones de allá.
11. La calle pequeña enfrente del súper Pali
Foto: Dana Ptacinsky
Las direcciones en Costa Rica son así – espontáneas, descriptivas, coloridas e inolvidables.
12. Los parques nacionales y reservas biológicas
Foto: Dana Ptacinsky
Treinta y cuatro, ni más ni menos, lo que equivale al 20 por ciento del territorio nacional. Visitar uno de ellos significa ver tonos de verde y escuchar cantos de aves nunca imaginados.
13. El clima impredecible
Foto: Tiago Palhota
“Dice la previsión que va a llover todos los días”, “Ah, bueno, siempre se equivocan, no haga caso”. Y es verdad. El clima costarricense es caprichoso y cambia varias veces en el mismo día. Lo mejor es ir preparado para todo lo que se presente: gorra, protección solar ¡y chubasquero!
Si estás esperando el autobús y te empiezan a tocar la bocina los carros, te costará darte cuenta de qué es lo que pasa, pero en cuanto alguien tiene la bondad de explicarte que son colectivos (coches particulares que te llevan a la otra punta de la ciudad o pueblo por una cantidad arreglada de antemano), todo cobra sentido. Se aprenden muchas cosas en los colectivos.
15. Las llamadas al centro de rescate
Foto: Tiago Palhota
No sé de otro país donde paren los vehículos a la vera del camino para llamar al centro de rescate más cercano cuando se encuentran un animal herido.
16. Las estaciones de autobús de San José
Foto: Tiago Palhota
Navegar las numerosísimas estaciones de bus de San José es ya de por sí turismo de aventura. Llegas a Tracopa pero sales de Tuasa, sales de Caribeños y llegas a Coca Cola… Si te queda claro, estás preparado para cualquier cosa que se te presente.
¿Qué decir del tráfico de San José y de la conducción en general? ¡Volvemos al turismo de aventura!
18. Los atardeceres
Foto: Dana Ptacinsky
Caribeños o pacíficos; los matices, los olores y los sonidos son inigualables.
19. La Imperial (fría)
Foto: Dana Ptacinsky
Esta cerveza local se convierte pronto en una aliada – en tardecitas calurosas y húmedas, la botella y su águila son lo que más apetece ver.
20. La piña
Foto: Dana Ptacinsky
Camiones llenos de piñas se pasean de norte a sur y de este a oeste. Dulces, frescas, naturales, a la plancha, en batido, en ensalada… Manjar de dioses.
21. Tu primer perezoso
Foto: Tiago Palhota
No creerás a nadie que te diga que no está sonriendo para la foto.
22. Los colores
Foto: Dana Ptacinsky
No hace falta ni que haga sol para que los colores hagan acto de presencia. Están en todas partes y nunca dejan de sorprender.
23. Los ticos
Foto: Tiago Pelhota
De lado a lado del país, los ticos te preguntan, te cuentan, te enseñan, te muestran y dejan su huella. Querrás agradecerles por compartir este país único, a lo que ellos responderán, “con gusto”.