1.
Empiezas a tener conversaciones un tanto contundentes sobre ciertas medidas gastronómicas almerienses como por ejemplo: las diferencias entre una tostada o media, un café con leche o una manchada, una ración o media ración…
2.
Afirmas saber lo que es un chérigan.
3.
Participas en tertulias, ya sea de forma física o en redes sociales, sobre temas urbanísticos que incumben a la ciudad: parques sin árboles, derribos de edificios de arquitectura popular, transformación de la Plaza Vieja, etc. También en temas de vías de comunicación: obras en la autovía A7, líneas ferroviarias limitadas, costes en la carretera del Cañarete…