Este 2019 el Bosque de Chapultepec fue reconocido como el Mejor Parque Urbano del Mundo por la World Urban Parks Association. La asociación describe a Chapultepec como el parque urbano más grande de América y el monumento natural más importante de la Ciudad de México. Aquí se reúne la historia antigua de la ciudad con elementos naturales, culturales y recreativos, lo que convierte a Chapultepec en una experiencia imperdible para turistas y locales por igual. Los chilangos sabemos que caminar un domingo por Chapultepec es lo más parecido a observar una radiografía de la Ciudad de México, pero esta postal de niños con la cara pintada, puestos de tortas de jamón y lanchas de remos por $60 pesos la hora se entiende mejor con un poco de contexto histórico. Aquí te dejo algunos datos que te harán ver a Chapultepec con nuevos ojos.
6 datos del Bosque de Chapultepec que ya deberías conocer
La unidad habitacional de Chapultepec
Las excavaciones realizadas en los últimos años en las laderas del Cerro de Chapultepec han demostrado que en esta zona ha habido asentamientos humanos desde el año 2500 a.C. Aquí se han encontrado vestigios de entierros relacionados con la cultura teotihuacana y se sabe que este lugar fue habitado por los tepanecas de Azcapotzalco y otras culturas mesoamericanas. Los mexica ocuparon este sitio en distintas ocasiones después de su llegada al Valle de México.
Después del establecimiento de México Tenochtitlán, Chapultepec fue un lugar de importancia ritual, pero también uno de los sitios más importantes en el desarrollo del imperio mexica, ya que desde este lugar llegaba el agua que abastecía a la ciudad.
Las Albercas
Los lagos artificiales que adornan el bosque no son los primeros cuerpos de agua que ha habido en Chapultepec. Durante siglos, Chapultepec contó con varias albercas que servían como los principales suministros de agua para la Ciudad de México. En estas albercas se recolectaba el agua de los distintos manantiales de la zona y en tiempos del imperio mexica se construyeron estructuras que ayudaron a abastecer a la población del líquido a partir de estos depósitos. A Moctezuma se le atribuye la canalización de algunas de estas albercas y la construcción del primer acueducto que llevaba el agua hasta Tenochtitlán.
Algunas de estas albercas fueron destruidas durante el sitio de la ciudad de México Tenochtitlán y fueron reconstruidas por los españoles una vez terminada la guerra. En la actualidad se ha restaurado la Alberca Chica, conocida popularmente como los Baños de Moctezuma.
Los restos del nuevo acueducto
Durante la época colonial se construyó un segundo acueducto para abastecer de agua a la Ciudad de México. Entre 1755 y 1779 se levantaron 904 arcos que se extendían por casi cuatro kilómetros desde las albercas de Chapultepec hasta la fuente de Salto del Agua. El inicio de este acueducto era una fuente monumental que hoy se encuentra olvidada en en medio del paradero de camiones en una de las salidas del Metro Chapultepec. De los arcos que conformaban el acueducto solo queda el pequeño tramo que se extiende por el camellón de Avenida Chapultepec a la altura del Metro Sevilla, los demás fueron demolidos en 1892. La fuente de Salto del Agua fue sustituida por una réplica y la original se llevó al Museo del Virreinato en Tepotzotlán.
El Sargento
Entre los miles de árboles que conforman el Bosque de Chapultepec hay uno destaca por su historia y longevidad. Se le conoce como el Sargento y es un enorme ahuehuete que —cuenta la leyenda— fue plantado por el rey poeta Nezahualcóyotl por ahí de 1460. Este es uno de los muchos ahuehuetes que se plantaron en Chapultepec durante el siglo XV y hasta la llegada de los españoles; de hecho, existen algunos árboles contemporáneos al Sargento en Chapultepec pero no son tan conocidos. El sobrenombre de Sargento lo recibió de los cadetes del Colegio Militar, más o menos 400 años después de haber sido plantado.
El Sargento sobrevivió hasta la segunda mitad del siglo XX y es considerado como uno de los árboles más viejos de la Ciudad de México. El tronco de este monumental árbol —con más de quince metros de altura y una circunferencia de 40 metros— sigue en pie junto a la Tribuna Monumental, un monumento dedicado a la memoria de los integrantes del escuadrón 201.
La entrada al inframundo
Muy cerca de donde se levanta el Sargento se encuentra uno de los espacios más extraños del bosque. Se trata de la gruta de Cincalco, una caverna por donde se entra al Mictlán, el inframundo de los mexica. Las historias antiguas cuentan que este fue el lugar en el que Moctezuma II intentó escapar cuando escuchó sobre la inminente llegada del ejército español. También se dice que aquí fue donde Huémac, el último gobernante del mítico pueblo tolteca, se quitó la vida y accedió al Mictlán. Todo esto ante los augurios que anunciaban el colapso de su imperio.
Actualmente los alrededores de la gruta se han transformado en el Audiorama del Bosque de Chapultepec, un sitio que invita a olvidarse de la ciudad y en el que solo se escuchan melodías clásicas y los sonidos del bosque. Es uno de los sitios predilectos de los amantes de la lectura y para todos aquellos que encuentran confort en saberse a las puertas del mundo de los muertos.
La casa de verano de Don Porfirio
El Bosque de Chapultepec fue abierto al público a finales de 1907 después de más de un año de labores para convertirlo en un parque urbano de nivel mundial. El nuevo espacio era uno más de los proyectos de Porfirio Díaz por embellecer la ciudad en el marco del centenario del inicio de la lucha independentista. Una de las partes más importantes del proyecto era la construcción de dos lagos artificiales con sus correspondientes embarcaderos. En una de las orillas del Lago Mayor se proyectó la construcción de una impresionante casona que serviría como casa de descanso para el presidente de México, la Casa del Lago.
Aunque nunca fungió como residencia de Don Porfirio, la Casa del Lago si fue residencia de un ex presidente. Adolfo de la Huerta —quien gobernó México por unos cuantos meses en 1920— utilizó la casa como su residencia particular mientras ocupó el cargo de secretario de hacienda entre 1921 y 1923. Además de residencia ex presidencial, la Casa del Lago ha sido sede del Club del Automóvil y del Instituto de Biología de la UNAM. Desde 1959 funciona como el primer centro cultural extramuros de la universidad.
El Bosque de Chapultepec contiene el 52% de las áreas verdes de la ciudad, en él se encuentran algunos de los museos más importantes del país y es visitado por más de 15 millones de personas cada año. ¿Hace cuánto que no vas a Chapultepec?
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