1. El Tajín fue la capital del imperio totonaca.
El Tajín era una ciudad sagrada, equivalente y contemporánea a Teotihuacán en la parte central de México y a Monte Albán en Oaxaca. Su nombre quiere decir Ciudad del Trueno y tuvo su mayor esplendor alrededor de los siglos VII y VIII. No hace falta ser un arqueólogo especializado para darse cuenta que sus edificios requirieron una buena dosis de esfuerzo y planeación. Aquí se realizaban muchas ceremonias importantes, se jugaba a la pelota y también se gobernaba.