Si te dijera que no podrás contarlos no estaría exagerando. Son tantos flamencos juntitos, uno tras otro, que parece que llenan todo el horizonte. ¡Lo único malo es que te va a faltar cámara para fotografiarlos!
¡Se abre la tierra y emerge el agua! A diferencia de los cenotes, los ojos de agua se encuentran generalmente entre manglares, así que para verlos debes hacer un viaje en balsa, desde donde podrás avistar la exuberante fauna yucateca.
¿Qué tal una visita a los cocodrilos de noche? Si, en Río lagartos podrás realizar tours nocturnos para saludar a estos amigos reptiles. Si tienes suerte podrás tocarlos y, quién sabe, hasta puedas tener una selfie…
En Yucatán tenemos buen viento todo el año, así que elevarte no será problema. Si eres de esos citadinos que quiere un poco de emoción en su vida pero no estás tan acostumbrado a la adrenalina, no te preocupes, también tenemos excelentes escuelas para aprender.
Todo Yucatán cuenta con ríos subterráneos llamados cenotes, agua pura y cristalina emerge de las profundidades de la tierra, considerados sagrados por los mayas. Los hay en caverna, abiertos o semiabiertos. Sus profundidades varían desde 5 hasta 70 metros. Pero esos datos no significan nada hasta que no nadas o buceas en uno de ellos. ¡No te lo pierdas!
Una aventura en el manglar con vegetación extensa, aves, sol y sobre todo un momento divertido… una actividad para expertos o para la familia, tú decides que es lo que quieres.
La costa yucateca está llena de sorpresas: Puedes encontrar desde los sitios más concurridos, como Puerto Progreso con sus restaurantes de mariscos a la orilla del mar, como también viajar unos cuantos kilómetros para ver espectaculares casas de veraneo, o bien seguir tu viaje y pasar por pueblos de pescadores con casitas pintorescas y comida deliciosa. Las playas de Yucatán tienen en sus arenas blancas espacio para todos los viajeros.
Si vienes a Yucatán y no visitas los sitios arqueológicos es como si no hubieras viajado. Puedes creer que te será suficiente conocer la maravilla del mundo Chichén Itzá, pero no puedes perderte Ek Balam con su majestuoso cenote, Dzibilchaltún, Uxmal, Aké, Mayapan, Oxkintok, Kabah y Labna. 