Nacer en Valladolid es un privilegio que muy poca gente en el mundo puede disfrutar. Tal dicha ha de ser compartida y esta ciudad da la bienvenida a todas aquellas personas que no habiendo tenido la suerte de nacer en Pucela desean convertirse y comportarse como vallisoletanos. Aquí mostramos las fases para llegar a ser uno de los nuestros.
Fase I: convertirte en vallisoletano
1. Has de montar en la barca del Campo Grande.
Normalmente este trámite obligatorio ha de hacerse siendo niño. Si tu conversión a vallisoletano te pilla adulto, has de pasar por el trámite igualmente. Es asignatura obligatoria escuchar las sorprendentes historias de los descendientes de “El Catarro”, nuestro entrañable barquero.