1. Léenos un pronóstico del tiempo en el que digan que va a llover.
Algo casi milagroso para los almerienses, pero es que si lo hace un pleno verano, estamos obligados ha hacer alguna peregrinación por tal divinidad del cielo. Eso sí, cuando llueve, ya que pedimos, pues que no falten el granizo, los fuertes vientos y algún que otro rayo.
2. U otro en el que aseguren que no hará viento en el fin de semana en verano.
Los planes de ir a la playa los domingos del verano ya sabemos que siempre irán acompañados del levantazo o del ponientazo.