Edimburgo no es una ciudad precisamente barata pero con ganas y un poco de imaginación uno puede visitarla sin dejarse un riñón. No lo digo por decir, yo misma hice un experimento en su momento: pasar 4 días en Edimburgo con 100 euros (130 dólares). Al principio no tenía del todo claro que eso pudiera hacerse, ¿cuatro días en Edimburgo con 100 euros comiendo todos los días y durmiendo bajo techo? ¿Era eso posible? Resultó que si y de aquella aventurilla low cost salieron una serie de trucos que también harán que tu viaje por esta escocesa ciudad llena de conciertos sea más barato.
Toma el autobús urbano y no el Airlink para bajar de aeropuerto
Empieza a economizar gastos tan pronto pongas un pie en la isla. Aunque el aeropuerto de Edimburgo está bastante cerca de la ciudad, no seas cómodo. En vez de un taxi súbete a un autobús. Pero no a cualquier autobús, súbete al urbano que te lleva a la ciudad y no al Airlink, el autobús para turistas que une el aeropuerto con la city. Los dos te dejarán en el centro, pero el primero por la mitad de libras que el segundo.
Hospédate en el West End y no en el centro
Ya sé que mola más dormir a la sombra del Castillo de Edimburgo pero si quieres ahorrar tendrás que buscarte una zona más económica. Mi recomendación es que eches un ojo al West End. En este barrio a cinco minutos andando de Princess Street, a 15′ del corazón de la ciudad, hay una oferta bastante interesante de albergues, hostels y hotels de todo tipo y categoría. Evidentemente, lo más económico es dormir en dormitorio compartido. Si buscas bien, hazte a la ida de que puede salirte no más de 10 euros que en esta ciudad es ciertamente aceptable. La zona es agradable, segura y cuenta con todos los servicios básicos (supermercados, cafeterías, tiendas, etc.). Recuerda que cuanto más te alejes del centro más barato resultará alojarte, pero no caigas en el error hospedarte demasiado lejos o acabarás pagando en transporte lo que quisiste ahorrarte en la habitación.
Únete a un tour gratuito por la ciudad
Son muchos los guías que ofertan sus servicios en Edimburgo. Los tours gratuitos de Sandemans, quizá más conocidos como los de las camisetas rojas, son parte de ellos. Su enfoque joven y divertido hacen que el paseo de más de dos horas por la ciudad sea una experiencia entretenida a la vez que educativa. Es la actividad perfecta para hacer recién aterrizado. Su recorrido incluye el Castillo de Edimburgo (por fuera), la Catedral de St Giles, la Royal Mile, el Old Town, los jardines de Princess Street y la prisión de Covenarnter, entre otros puntos de interés. Estos tours gratuitos empiezan en Tron Kirk (frente al Starbucks Coffee de High Street) todos los días, de lunes a domingo, a las 10:00, las 11:00 y las 14:00 horas. Los hay en inglés y en castellano. Su precio es la voluntad, de ahí que sean gratuitos pero no.
Para almorzar, ¡cómete un desayuno!
Para ahorrar gastos en avituallamiento puedes hacer dos cosas. Una es desayunar en el hostel. Muchos ofrecen té, café y leche gratis, algunos puede que hasta que galletas. La otra es tomarte un desayuno escocés para comer en lugar de para desayunar. Muchas tabernas del centro de la ciudad lo ofertan hasta las 14:00 o las 15:00 horas, puede que incluso todo el día, y resulta tan fuerte que para muchos puede ser una comida en toda regla. Huevos, bacon, mantequilla, black pudding, etc. Toda una bomba hipercalórica que podría reventar el estómago de más de uno a primera hora de la mañana. ¿El precio? Entre 7 y 9 libras (entre 11 y 14 dólares) en el centro de la ciudad, que no está nada mal y es sensiblemente inferior al de un buen plato de lo que sea.
Disfruta de Edimburgo en 360 grados por cero dólares
Si quieres ver la ciudad y sus alrededores desde las alturas y en 360 grados sin pagar extra encarámate al Arthur’s seat, un pequeño monte de menos de 300 metros de altura al que podrás acceder haciendo un mini-trekking. La vista es muy bonita, con mar incluido, y te permite conocer las dimensiones reales de la ciudad, así como llevarte unas preciosas instantáneas desde la cima. Es más que recomendable hacer este camino con unas buenas botas y solo si el tiempo acompaña.
Visita los museos más relevantes (son gratuitos)
No todos los museos de Edimburgo son de entrada libre, pero si muchos de ellos. Por el precio de cero libras podrás hacer una visita a la oveja Dolly en el National Museum of Scotland, y a las bailarinas de Degas en la Scottish National Gallery. Para saber más de la historia de la ciudad adéntrate en el People’s Story Museum, una pequeña colección tipo etnográfica sobre la vida de los escoceses de esta ciudad. Entrar al Castillo de Edimburgo cuesta un dinero considerable, si estás pensando en hacer una ruta por el país y visitar muchos castillos considera comprar un pase cultural. Te ahorrará muchas libras.
Atrévete a visitar los cementerios
Los cementerios de Edimburgo pueden resultar siniestros o preciosos, generalmente ambas a la vez. En realidad, a muchos le parecerán bonitos parques llenos de tumbas o esculturas pues no pocas lápidas tienen una clara vocación monumental. Asimismo, numerosas personalidades descansan en estas tierra. No olvides presentar tus respetos al filósofo David Hume ni al escritor William Blackwood antes de marchar. Ambos descansan en el Old Calton Burial Ground abierto las 24 horas, de entrada gratuita.
En vez de una pinta entera, ¡tómate media!
Esta es la recomendación más dura de todas las de la lista. Cuando vayas a ver un concierto fantástico a una taberna perdida en alguna calle oscura del Old Town pide media pinta (half pint) en vez de una entera (pint). Pagarás la mitad por cada consumición (porque beberás la mitad). La buena noticia es que tu rubia siempre estará fresquita. Con todo no dejes de consumir si vas a un bar; recuerda que es un negocio, no una actividad lúdica gratuita para que tu disfrutes por tu cara bonita.