1. No lleves tu itinerario todo cerrado.
Si hay algo en Asia para lo que debes dejar espacio es la improvisación. En Asia los planes cerrados sirven de poco, y es que es el lugar idóneo para romper itinerarios preestablecidos y dar rienda suelta al viaje, dejándote sorprender totalmente. Imagínate llegar a una playa paradisíaca en Tailandia y que únicamente hayas programado dos días allí. ¿De verdad no te quedarías una semana disfrutando del paraíso? Nosotros lo haríamos sin dudarlo ni un segundo