1. Dejé de hablar todo el tiempo con desconocidos.
… O de ser yo quien comience la conversación. Si bien es cierto que los suizos son personas con buenos modales, eso de estar en la parada del bus hablando sobre la situación política del país o sobre lo costosas que están las cosas, no será bien visto. En Venezuela, en cambio, ni el señor del kiosco se salvaba para hablar de la familia y el trabajo.