Este pequeño reno blanco bien podría competir con los camaleones por su habilidad de camuflarse. Mientras realizaba una caminata con sus amigos por las montañas del norte de Noruega, el fotógrafo de 24 años, Mads Nordsveen, encontró a este curioso reno en la nieve —aunque bien hubiera podido pasar de largo. “Se confundía increíblemente bien con la nieve”, mencionó Nordsveen en una entrevista con Insider. El color de la piel de este animalito se deba a una extraña condición genética —distinta al albinismo— que afecta la pigmentación de la piel.