1. Pitahaya
Esta fruta no sólo es deliciosa, sino que además su belleza te va a sorprender. Esta exótica cactácea que crece cerca de albarradas o muros es una auténtica obra de arte de la naturaleza. Sirve para preparar gelatina, helado, dulces, mermelada… el agua de Pitahaya es super refrescante. Además de ser deliciosa, se le atribuyen propiedades curativas, especialmente contra la gastritis.