12 juguetes tradicionales mexicanos dignos de coleccionar
En una época de tabletas y aparatos electrónicos, todavía hay un lugar para los juguetes tradicionales en el corazón de los niños, niñas y bebés mexicanos.
No hace falta encender un botón o enchufar un cable.
Estos juguetes icónicos de nuestra cultura popular jamás pierden vigencia y hacen felices a niños y a adultos por igual.
Las muñecas están entre los juguetes más populares.
Las muñecas “Lupita” de cartón tienen más de 200 años y, aunque no se sabe con exactitud de donde provienen, hay registros de su producción en la Ciudad de México, Celaya y Guanajuato. Son hechas a base de papel maché y pintadas a mano.
Su vestimenta normalmente es un conjunto de pantalones cortos que lleva flores de diseño otomí. El color de su piel suele ser rosado y sus ojos y pestañas enormes. Su cuerpo curveado es algo llenito y transmite una imagen muy simpática y tierna.
Con el paso del tiempo su vestimenta se ha ido modernizando, pero no dejan de ser unas muñecas hermosas.
Hay una gran variedad de muñecas de trapo, pero lo que tienen en común es que son hechas de tela, confeccionadas a mano y su relleno consiste en retazos del mismo material. Hay una gran variedad y en casi cada estado de la república podrás encontrar una diferente. El traje típico que visten es lo que las diferencia.
Una de las muñecas de trapo más famosas de México es es la muñeca otomí de Querétaro que, de hecho, acaba ser declarada patrimonio cultural del estado.
Estas preciocidades representan a Chiapas.
Crédito: @rociofdzm
Recuerdo perfectamente cuando jugaba a la casita de muñecas y contaba con todos los accesorios para una cena muy bien servida para consentir a mis muñecas más especiales.
El balero fomenta la habilidad manual.
Está hecho de madera y tiene una cuerda delgada. Su manejo puede llegar a ser todo un arte.
Las marionetas y títeres…
Hechos de madera o cartón y tela, se manipulan con la mano o por medio de hilos o varillas que representan todo tipo de personajes. Con ellas puedes contar historias que hagan volar la imaginación.
La matraca está considerada como un instrumento musical.
Su finalidad es hacer el máximo de ruido posible. No hay fiesta, ya sea en los estadios o en las calles de los pueblitos, en la que no haya maracas.
La pirinola o toma-todo.
Es un pequeño trompo, por lo regular de madera o plástico, que tiene en cada uno de sus lados escrituras. Lo haces girar por turnos y, cuando se detiene, deja una cara con la inscripción de la suerte para jugar y hacer apuestas.
¡Las competenecias de trompo son las más divertidas!
El yoyo no precisamente es un juguete de origen mexicano, pero la característica del yoyo mexicano es su colorido y el tallado en madera.
Saltar la cuerda es una actividad que se remonta a 1600 a.C.
Puedes pasar horas jugando o haciendo ejercicio ya sea solo o en equipo, haciendo competencias.
La lotería llegó a México en 1979 y no nos pensamos deshacer de ella jamás.
Con sus 54 diferentes personajes plasmados en tarjetas y 16 cartas, este juego une a familias y amigos y es casi obligado en las fiestas mexicanas.
Hay carritos de diferentes tamaños y materiales.
La mayoría son de madera y hechos a mano. ¿Cuál era tu favorito?
Los instrumentos musicales de juguete son magia para los más pequeñitos.
¡¡¡Los luchadores!!!
Espero este artículo te haya llevado a tu niñez y que el paseo te haya hecho feliz. Finalmente, y por si tenías alguna duda de que nuestros juguetes son también artesanías, te dejo este vídeo para que seas testigo del trabajo manual que implica hacer un balero.