Estando en España ¿sabes cuántas veces llegué al supermercado en domingo para encontrarlo cerrado? Y es que como buen mexicano las compras de comida y el día de limpieza se reservan para este día, provocando filas interminables en tiendas, plazas y mercados. En México bien podríamos adoptar la idea de descansar en este día. Me he visto obligado a organizar mejor mis tiempos de la semana, para no tener ningún pendiente el domingo y ahora puedo decir que es un día en el que disfruto totalmente de mi tiempo libre.
Desde hace varios años, España se ha posicionado como uno de los líderes mundiales en donación de órganos, logrando que se realicen más de trece trasplantes por día. Mientras, en México estamos muy abajo en la escala mundial de donadores. Estimado mexicano ¿sabías que siendo donador de órganos podrías salvar hasta siete vidas?
A México no le vendría nada mal hacer como los españoles y respetar los semáforos, no tirar basura en la calle, esperar a que la gente salga del metro antes de abordarlo. Siento decírtelo, pero nos falta convicción para asumir de corazón nuestros derechos y deberes como ciudadanos.
Es un verdadero placer conocer los horarios de trenes, líneas del metro y autobuses. Aunque de vez en cuando exista un retraso de pocos minutos, sabes con certeza que llegarás a tiempo a tu destino. ¡Sueño con un México así!
Los españoles saben cómo disfrutar de sus terrazas: un café, un vermut, unas papas fritas, una cerveza. No hay semana que pase sin que los amigos/colegas se reúnan para compartir su tiempo. Por mucha crisis que haya, frío, calor, o estrés, siempre tengo algún amigo invitándome a reunirnos en el local de siempre. ¿Por qué esperar hasta el fin de semana para socializar, como hacemos en México?
Querido mexicano, ¿Cuántas veces has acompañado a tu abuelita a misa, o has terminado como padrino de recuerditos de la prima de una de tus amigas? ¿Cuántas veces terminas yendo a una fiesta a la que no querías ir, o comiendo lo que no querías comer? Y todo porque no sabemos decir que no. Deberíamos comenzar a perderle el miedo a decirlo y sobre todo a no ofendernos tanto cuando alguien nos diga con toda sinceridad: “NO”.
Debo admitir que es algo a lo que aún no me he acostumbrado. Hay días en los que tengo la sensación de que dormir a media tarde es una pérdida de valiosas horas del día, y es cuando descubro que los mexicanos estamos educados para producir y trabajar a todas las horas posibles. En España la hora de comida de los trabajadores puede llegar a ser hasta de 2 horas, porque incluye el tiempo de comida y el tiempo de la siesta. Está comprobado que un trabajador bien descansado es más productivo. Venga ¡todos a dormir!
No es que en España no tengan platillos elaborados y con muchos ingredientes, pero pareciera que en México hasta la ensalada más sencilla debe llevar cientos de condimentos. No nos vendría mal disfrutar del sabor del jamón solo, del tomate, de las aceitunas, o de los cacahuates. Te propongo que te hagas una torta con un solo ingrediente y que te dejes sorprender por los sabores sencillos.
Además de ser unos expertos en decir “no” sin tantos rodeos, los españoles son buenos en ir directo al grano. No se andan con rodeos al momento de hacer negocios o de pedirte un favor. Es muy común recibir una llamada o un mensaje para pedirte algo o hacerte una pregunta sin tener que pasar por el, muchas veces falso, “¿qué tal?, ¿cómo has estado?, disculpa ¿te puedo hacer una pregunta?”. Menos pedir perdón y más directito a lo que queremos ¿Soy el único que a veces se cansa de tanta formalidad? Ojo: otra cosa es pedir las cosas con educación, lo cual me parece más que necesario.
En el 2016 España logró reciclar el 74,8 por ciento de los envases de plásticos, latas y envases de papel/cartón; mientras que en México llegamos solo al 33 por ciento. Vamos mexicanos, pongámonos las pilas…
Hace ya algunos años que España pasó a ser uno de los países más tolerantes del mundo hacia la comunidad LGBTTTI, además de haber dado varios pasos importantes en materia de legislación y de derechos. Mexicanos, salgamos a marchar para exigir que se respeten los derechos de todos los seres humanos, no para pedir que se les nieguen a algunos sólo por no compartir alguna preferencia sexual.
Son una gran tendencia en España. El uso de estos medios de transporte evita los embotellamientos y en gran medida ayudan a combatir la contaminación. Sin duda los carriles especiales para bicicletas y el nivel de respeto que hay entre transeúntes y conductores ayudan a mantener el orden y la paz en las calles.
Tenemos un país maravilloso con un potencial inigualable, seamos honestos y dejemos un poco de culpar al gobierno y comencemos un verdadero cambio comprometiéndonos con nosotros mismos, con nuestros compatriotas y con nuestro querido país. 