Un recorrido visual por las cascadas más espectaculares de México
1. Cascada de Tamul, San Luis Potosí
Tamul es un paisaje que deja con la boca abierta a cualquiera. Agua azul turquesa, paredes de piedra que se elevan a pocos metros del río y una caída de agua de más de cien metros… ya saben, todo lo necesario para entrar en primer lugar en una lista de las cascadas más espectaculares de México. Esta cascada está en la huasteca potosina y es de los lugares más bonitos del estado (y miren que tiene competencia).
Llegar hasta la cascada requiere de un poco de esfuerzo (hay que remarle un rato), pero el paisaje vale eso y mucho más.
2. Cascadas de Agua Azul, Chiapas
Agua Azul es uno de los destinos ecoturísticos más famosos de todo México. El color de estas cascadas se debe a la naturaleza calcárea del lecho del río.
El color azul es más intenso durante la época de secas, pero las cascadas son un espectáculo natural impresionante independientemente de la época del año en que las visiten.
3. Cascada de Basaseachi, Chihuahua
Con cerca de 250 metros de caída libre, esta cascada es el salto de agua permanente más alto del país. Está dentro del Parque Nacional Cascada de Basaseachi y forma parte de la Sierra Tarahumara.
Basaseachi vierte sus aguas en la Barranca de Candameña, que alberga otra de las cascadas más espectaculares de México.
4. Cascada de Piedra Bolada, también en Chihuahua
Con una caída cercana a los 450 metros, Piedra Bolada (sí, así se escribe) es la cascada -de temporal- más alta del país. También se ubica dentro del Parque Nacional Cascada de Basaseachi pero, a diferencia de la anterior, aparece sólo durante ciertos días en la época de lluvias.
5. Hierve el Agua, Oaxaca
Definitivamente no son las cascadas más tradicionales. Las cascadas petrificadas de Hierve el Agua se han ido formando por la acumulación de minerales presentes en los manantiales de la zona, formando este paisaje que se antoja para set de película de Star Wars.
El manantial que dio origen a estas estructuras sigue abriéndose camino hasta la superficie, formando una alberca natural de agua termal en la cima de las cascadas. ¿Qué más le pueden pedir a la naturaleza?
6. Cola de Caballo, Nuevo León
Cola de Caballo es parte del Parque Nacional Cumbres de Monterrey y está ubicada a menos de una hora de dicha ciudad. Aunque sus dimensiones son bastante más modestas en comparación con otras de las cascadas aquí mencionadas, esta caída de agua tiene un lugar en la lista porque es increíblemente fotogénica.
La cascada se puede disfrutar desde varios miradores y la zona es perfecta para los que quieran andar en bici, tirarse de una tirolesa o recorrer los senderos del parque. Hay cabañitas y toda esa onda.
7. Salto de Eyipantla, Veracruz
Tal vez sus 50 metros de altura no suenan a mucho, pero esta caída de agua es bastante impresionante. Su cortina es bien ancha, tiene la vegetación de la selva de Los Tuxtlas de fondo y hasta un caminito que te lleva cerca de la base de la cascada.
Además, Los Tuxtlas es una de las zonas más bonitas de Veracruz. Si nunca has ido, debería estar en tu lista.
8. Cascadas El Chiflón, Chiapas
Este sistema de cascadas no le pide nada a las de Agua Azul. La cascada más alta supera los cien metros de altura y tiene ese mismo color tan bonito.
Las cascadas están cerca de Comitán y pueden ser una alternativa a Agua Azul en temporada alta.
9. Cascada de Tulimán
Ubicada en la Sierra de Puebla, Tulimán es una cascada compuesta por tres caídas que en conjunto superan los 300 metros de altura. Este lugar se ubica a pocos kilómetros de Zacatlán de las Manzanas y tiene una infraestructura turística bastante desarrollada. Hay manantiales, senderos, cabañas y bien te puedes pasar aquí un fin de semana completo.