Photo: rybarmarekk/Shutterstock

Los 10 rincones más irreales de Islandia

Iceland
by Sonsoles Lozano 20 Jan 2017

1. Strokkur

Es el mayor geyser activo de toda la isla, y se encuentra en el llamado Golden Circle. Explota cada cuatro minutos de media, con diferentes intensidades cada vez. Muchas veces engaña con falsos amagos de explosión, así que no bajes la guardia. Posiblemente cuando estés mirando en la pantalla la foto tan bonita que acabas de tomar sea cuando nuestro amigo salga despedido a su mayor altura.

2. Thingvellir

Significa literalmente «explanada de la asamblea». Aquí es donde se asentó el primer parlamento europeo, tal como lo concebimos. Pero quizás lo que más nos da gustico al visitar Thingvellir es saber que si tocamos la pared derecha de ese cañón estaremos sobre la placa euro-asiática. Y que si vamos a la otra pared, cambiamos de continente y nos asentamos sobre la placa americana. ¡Viviendo al límite en menos de cuatro metros!

3. Vik

Las playas de arena negra volcánica, con sus tres monolitos surgiendo del mar, te dejarán sin palabras, sin aliento y con las piernas flaqueando. Si encima, eres fan de Juego de Tronos, puedes llegar al orgasmo fácilmente.

4. Vatnajökull

El mayor glaciar de toda Europa se encuentra en el Parque Natural de Skaftafell. En este parque tienes varias rutas de senderismo y el mejor lugar para el descanso —y quizás para un Skyr— es a los pies de la lengua de este glaciar. Se escuchan los bloques de hielo al romperse y desprenderse, un sonido que no podrás sacar de tu cabeza nunca jamás.

5. Jökulsarlon

Según muchas revistas de viajes «el lugar más bello de la isla y uno de los del mundo». Y yo coincido, lo acato y lo confirmo. Un escenario digno del más puro realismo mágico. Hasta elfos pueden aparecer a tus pies, y lo más fuerte es que ni siquiera te sorprenda ese «pequeño detalle».

6. Námafjall

Si te tapan los ojos y te quitan la banda cuando estés en este lugar, pensarás que estás en la luna de verdad. Pero en serio, fuera bromas, ¿qué son esas fumarolas que salen de la tierra?, ¿qué son esos colores imposibles?, ¿qué hierve y gorgotea en esas calderas de lodo gris?, ¿qué es ese olor….? Tras conocer este lugar, nunca fui la misma.

7. Dimmuborgir

Una alucinación geológica producto de una enorme erupción volcánica, y otra delicia más para los fans de Juego de Tronos. Aquí es donde Jon y la salvaje Ygritte se enamoran y sucede el único tikitikitakataka conocido del chico Snow. Poca broma. Para colmo, según la leyenda islandesa, aquí viven los Jólasveinar, los 13 Santa Claus de la navidad.

8. Todas las “foss” que encuentres

Foss significa cascada, y lo vas a aprender rápido porque no hay una, ni dos, ni tres, hay cientos. Puede que miles, ¿quién sabe? Lo llaman el país del hielo, pero para mí es el país del agua. Todas y cada una de ellas merece una parada, o quizá algunas más que otras. Gullfoss, Goðafoss, Skogafoss, Svartifoss…

9. Piscinas calientes

Ya sea la famosa y concurrida Blue Lagoon u otras más salvajes y gratuitas, todas merecen un baño. Desde Hveragerði puedes hacer un trekking de 2 horas, que va a parar a un río caliente del que no querrás salir durante horas.

10. Snæfellsnes

La península de Snæfellsnes es para visitarla metro a metro, un lugar donde volví una y otra vez, siempre que podía. Magnética, irresistible.