1. Déjame tu número que yo te llamo…
2. Yo puedo ir a Maracaibo sin que se me pegue el maracucho…
¿Qué fue, trimardito, cómo tais? Me fui una semana y te pusiste mollejuo, ¡vais a reventar pa’ la verga!
3. Me conozco Caracas como la palma de mi mano.
Y buscando “Plaza La Candelaria” llegó a “Dos Caminos”.