1.
A no clasificar para un mundial de fútbol. Eso sería algo así como el principio de la extinción de la raza argenta.
2.
A jugar la final con Alemania. Por algún oscuro designio, posiblemente orquestado en Frankfurt, cada vez que jugamos una final del mundo con Alemania, perdemos por un gol.
3.
A que Messi se equivoque al patear un tiro libre, porque eso podría significar que los argentinos no somos perfectos.