1. La comida mexicana es puro taco.
La cocina tradicional de México se basa principalmente en el maíz y sus derivados; sin embargo, por difícil que resulte creerlo, no todo en México son tortillas. La diversidad culinaria de nuestro país es enorme y hay especialidades locales por región, e incluso por pueblo, a lo largo y ancho del territorio. Claro que podrían darle la vuelta a México sobreviviendo a base de totopos, tamales y chilaquiles, pero lo recomendable es indagar un poco más sobre lo mejor de cada región. Prueben un poco de la tradición maya con una buena sopa de lima en Yucatán (que no es sopa de limón, ni de limón dulce, es sopa de lima), éntrenle a los famosos tacos de pescado en Ensenada o pongan a prueba su resistencia al chile con una torta ahogada en Guadalajara. Si existe una opción perfecta para cada tipo de mexicano, seguro que hay una opción perfecta para cualquiera.