1.- Pasear de noche por la ciudad, sin olvidarte del Puente de las Cadenas, una de imágenes más bellas de la ciudad.
2.- Recorrer en varias ocasiones la Avenida Andrássy, Patrimonio de la Humanidad, llena de palacios con fachadas increíbles a cada paso.
3.- No te será fácil, pero pararte frente al Monumento de los Zapatos, dedicado a los judíos fusilados y lanzados al río Danubio por los nazis, va a ser una experiencia muy emotiva, porque en un minuto podrás conectarte con una de las historias más tristes de esta bella ciudad.
4.- Subir al Castillo de Buda con el funicular, para poder disfrutar de las vistas y después bajar andando para verlo desde un perspectiva diferente.
5.- Relajarte en el Bastión de los Pescadores, frente a una de las mejores vistas de Budapest.
6.- Pasear, de día y de noche, por Váci Utca, una calle llena de tiendas y cafeterías, con uno de los ambientes más animados de la ciudad.
7.- Probar el Goulash húngaro, un estofado de ternera con bastante pimentón picante, típico de Budapest y que, estamos seguros, no te dejará indiferente.
8.- Pasear por la orilla del Danubio, de día y de noche, hasta llegar al Parlamento, considerado como uno de los paseos más románticos del mundo.
9.- Ir a la Ópera de Budapest. Te aseguramos que, únicamente por ver su interior, la experiencia ya merece la pena.
10.- Relajarse en la piscina exterior del Balneario Széchenyi, sobre todo si es invierno, ya que el contraste entre el frío del exterior y el agua caliente hacen de esta una experiencia única.
11.- Pasear por el Parque de la Ciudad, en el que también podrás ver el Castillo Vajdahunyad.
12.- Disfrutar de un strudel, llamados rétes aquí, y son algo diferentes a los típicos de Alemania o Austria.
13.- Tener una de las mejores vistas de Budapest desde La Ciudadela, el punto más alto de la ciudad.
14.- Adentrarte en la Cueva Palvolgyi, una de las 200 cuevas que encuentran debajo la ciudad.
15.- Probar un auténtico lángos, una delicia de la gastronomía local que es una especie de pizza hecha con pasta de patata. ¡Seguro que te encantará!
16.- Hacer una fotografía a la curiosa y bella escultura Little Princess Statue, ubicada muy cerca de la orilla del río Danubio.
17.- Pasear por los alrededores y cruzar el Puente de las Cadenas, el más antiguo de Budapest y, al menos para nosotros, uno de los más bonitos del mundo.
18.- Después de un día agotador visitando Budapest, encerrarse en el famoso Balneario Gellert, para reponer fuerzas y seguir disfrutando de la ciudad.
19.- Visitar la Iglesia de Matías, el templo católico más conocido de Budapest, ubicado muy cerca del Castillo de Buda y un complemento perfecto a la visita del castillo.
20.- Intentar, antes de irte de Budapest, abrir su souvenir más típico: una cajita secreta. 