Y me preguntaréis algunos: ¿qué es un viajero slow? Pues, literalmente, un viajero o viajera que va lentico por la vida.
El slow travel forma parte del gran movimiento slow, que engloba varias áreas de la vida. El movimiento slow food es el más conocido, pero esta filosofía que desafía el culto a la velocidad llega hasta el urbanismo, la arquitectura, la medicina, el sexo, el trabajo, el ocio, la psicología, la educación de los niños y también hasta los viajes.