A la hora de planear un viaje por Europa e ir calculando cuál será el presupuesto diario, es fácil olvidarnos de un pequeño gasto extra con el que muchas veces no contamos: la tasa turística.
Suele tratarse de poco dinero, una media de un par de euros por noche, pero si vas a viajar mucho tiempo esa cantidad se puede convertir en un número nada despreciable. Es decir, lo mejor es contar con ese gasto con antelación, pero hay un problema: es un tema un tanto caótico. Unos lugares lo cobran, otros no; la cantidad varía de un lugar a otro, cambia la edad a partir de la que se paga, el número de noches, el criterio… En este artículo intentamos resolver las dudas más comunes. De todas formas, intenta siempre informarte sobre los lugares particulares que vas a visitar (en la página de la European Tourism Association (ETOA), fuente principal de este artículo, hay información muy detallada en inglés; si no, pregunta en las oficinas de turismo, ellos lo sabrán).