EL OTRO DÍA desayuné en un bar y, mientras me tomaba el café, eché una ojeada al periódico. En la contra, una noticia llamó mi atención: «El Orient Exprés se hace viral». El subtítulo no dejaba lugar a dudas: «El mítico tren, que ahora recorre Turquía, de moda por Instagram».
En la noticia contaban que lo que hasta hace no mucho era un trayecto no especialmente popular (todo por Turquía, de Ankara a Kars en 24 horas) y cuyos pasajeros tenían una media de 50 años, es ahora todo un fenómeno turístico gracias a Instagram. El año pasado viajaron en él 100.000 personas más que en 2017 (un aumento del 25%) y los billetes se agotan con meses de antelación. El éxito es tal que el ministro de Cultura y Turismo turco acaba de anunciar que van a lanzar un nuevo Eastern Express (es este el tren y no el Orient, error de la noticia) solo para turistas.