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Yo nací en Argentina, donde...

by Laura Bernhein 18 Jun 2015

Un buen amigo es una bestia.

La amistad es parte de la religión.

Las risas, los enojos y las lágrimas son tan ciertos como el tango Cambalache.

El “término medio” es un reino de fantasía del que hablan los cuentos de hadas.

Cada encuentro es una celebración de la que se sabe cuando empieza, pero no cuando termina.

¡“La noche está en pañales” es nuestro lema!

Los políticos dicen frases memorables como “Tenemos que dejar de robar por dos años”.

Y, más de 20 años después, ¡todavía estamos esperando que ocurra el milagro!

Porque, a pesar de todo, aún somos un pueblo de mucha, muchísima fe….

La mayor politóloga de todos los tiempos tiene seis años y se llama Mafalda.

“Nos vemos a las 9” significa: “Bueno, voy a tratar de llegar tipo 11, pero vos sabés cómo funciona el bondi…”.

No nos complicamos demasiado para armar el mejor banquete del mundo: asado, vino y panqueques de dulce de leche es el menú favorito de los ángeles, ¿no lo sabían?

¿Y no sabían tampoco que Dios es argentino? Al menos una de sus manos lo es…

Donde suenan hasta las campanas de las Iglesias si Argentina gana un partido del mundial.

Y las bocinas están para hacer ruido y para expresar nuestras más variadas emociones.

No necesitamos escuchar tango porque, nos guste o no y sin importar donde vivamos, somos un tango… burlón y compadrito.

Juntarte con un amigo a tomar un cafecito significa tener las conversaciones más interesantes de tu vida.

Las cacerolas son para protestar.

Las normas de tránsito para… ¿alguien sabe para qué era que estaban?

Una botella de plástico sobre un coche significa “Se vende”.

“Che, boludo” es un nombre propio.

Y la sandía y el vino tinto combinados son… ¡una trampa mortal!