Recién después de un rato largo vamos a poder confirmar que sí, ¡hablan español!
Las expresiones cachai, webá, webón, guagua, pololo, carrete o copete van a confundirte mucho al principio, sumado esto a la velocidad con la que hablan los chilenos, que casi no paran para respirar. Sus frases suenan a una sola y larguísima palabra.
A tu “¿Qué contás boludo?” le va a seguir un “Hola conchatumadre”.