La ayahuasca es una medicina vegetal que se utiliza con frecuencia en rituales y ceremonias de los pueblos amazónicos. Por sus propiedades psicoactivas, el brebaje ha cobrado cierta popularidad entre los viajeros, que acuden a las comunidades en la selva para sanarse o para profundizar en el mundo de las energías, el inconsciente y la cosmovisión amazónica.
En 2015 me aislé en una cabaña a orillas del Río Mayo, en la selva de Perú, para tomar, junto a otras dos personas y nuestro chamán, esta bebida, también llamada la “soga de los muertos”. Esto es lo que aprendí de aquella experiencia.