1. Abuelita de Batman.
El árbol genealógico del hombre murciélago sale a relucir con el único motivo de hacer nuestras afirmaciones más rimbombantes. Esta frase es un eufemismo del menos cordial “¡a huevo!”, que en el lenguaje popular de México, sustituye al simple y monosilábico “sí”.
También se vale:
Abuelita soy tu nieto.
Abuelita, mi café.