Una palabra preciosa que califica a esos ratones de biblioteca que se pasan el día entre libros. Un lletraferit es un amante de las letras, la lectura, el culto al texto y la palabra escrita. En definitiva un sabut muy leído.
Ejemplo: Siempre gana al trivial porque es un auténtico lletraferit.
Cuando la emoción es tan grande que se te eriza el vello, entonces te aborrones. Nada que ver con borrar ni abotonar, un concepto mucho más poético que los valencianos sentimos, por ejemplo, cuando disfrutamos de una mascletà. Según el diccionario normativo también tiene la connotación negativa de horrorizar, así que nos aborronamos mucho cuando vemos los «paellicidios» que se comenten por todo el mundo.
Ejemplo: M’aborrone cuando suenan las notas del himno regional.
La palabra intraducible por antonomasia. Provoca desfici intentar explicarla: agitación, impaciencia, desazón, ese estado por en el que se encuentra la gente con fiebre de no saber muy bien qué hacer con su cuerpo. El adjetivo desficiosito también se aplica cariñosamente als xiquets cuyo estado de nervios resulta exasperante.
Ejemplo: Estoy en la cama muy desficioso.
Cuando una persona está realmente pagà u orgullosa por ejemplo de sus hijos, está desvanit. Es tanta tu emoción y tu orgullo que casi casi desvaneces de satisfacción.
Ejemplo: Está desvanit con su hija pequeña.
¿Cutre? ¿Hortera? ¿Cursi? ¿Kitch? ¿Vulgar? ¿Excesivo? ¿Ridículo? Alguien puede ir muy coent a una boda sin ser hortera ni cutre ni vulgar. Cuando ves a alguna cosa tan antiestética que te escuecen los ojos sólo de mirarla, en ese punto le encuentras sentido al adjetivo coent. De hecho coent viene de coure, que es picar, pero se aplica a la falta de estilo ya sea por excesivo como por vulgar.
Ejemplo: El vestido que lleva costará una morterà, pero es muy coent.
Ese personaje metomentodo y cizañero que está siempre liándolo todo, ese es el manifesser. Mientras la xafardera cuenta las cosas de todo el mundo, el manifesser intenta maniobrar en su propio interés.
Ejemplo: Ya está el manifesser enredando con el jefe.
¡Mira tú por donde al final he reviscolado! Recuperarse, recobrar el vigor, según el diccionario «adquirir una nueva vida alguien que está próximo a la muerte o apagado». El Ave Fénix no renace, reviscola.
Ejemplo: Estaba en casa hecho polvo, pero he resviscolado.
Literalmente ‘empujón’. Pero tener espenta es mucho más que tener empuje, es esa actitud vital tan de moda de ser emprendedor, de ver las cosas fáciles, de animar a la gente y nunca desfallecer. Su antónimo valenciano sería tener la sangre de horchata.
Ejemplo: Me encanta ese chico, pero tiene menos espenta que una figa molla.
Si además de listo y simpático es templat, el chico ya lo tiene todo. Esa belleza sana, de una persona bien plantada, eso es ser templat. Bonica seria guapa, pero si es templà, además de guapa está lozana.
Ejemplo: Tienes un novio muy pero que muy templat.
Las abuelas aún dicen eso de “coge una muda limpia si vas al doctor” y los valencianos, que nos tomamos eso de la apariencia bastante en serio, preferimos la ropa de mudar, es decir, elegante. Si voy mudado voy vestido de domingo, y una camisa mudadora es una camisa aparente, resultona. Como las serpientes, hay que mudar de vez en cuando la piel, y mudarse para ocasiones especiales.
Ejemplo: Tengo que ir a la boda de Carmen y me he comprado una bateta mudadora.
Los valencianos no nos explicamos que ir todos juntos a un mismo sitio no se convierta en una fiesta. Por ello cuando hacemos un comboi, no estamos haciendo una caravana del oeste americano, estamos montando alguna paella, torrà, o improvisando una celebración. Y como hacemos comboi en un pensat i fet, somos muy de comboiarnos.
Ejemplo: Este domingo podríamos hacer comboi y montar una cenita a la fresca.
El xiquet està potrós, es algo que diremos cuando el niño esté nerviosito, pesadito, renegón o llandós; mientras potroso según la RAE en castellano es quien tiene potra, suerte, y por tanto es afortunado. Si un valenciano dice que estás potroso o potrós, es porque estás muy insoportable.
Ejemplo: No hay quien aguante a tu hijo, hoy está muy potrós.
El ninot es un muñeco, también las esculturas que quemamos en fallas y fogueres, pero además es aquella persona que se deja manejar cual marioneta por los demás. Todos conocemos a esos ninots sin personalidad que ni son para jugar, ni para quemarlos en una falla.
Ejemplo: Ese político no pinta nada, es un ninot.
En South Park había un personaje, Eric Cartman, que no estaba gordo, estaba fuertecito. En verdad lo que estaba era guaixat, que el diccionario califica como «fuerte, robusto y gordo». Más que gordo sería rellenito; más que fuerte, fuertecito; y más que robusto, anchito. Porque los valencianos somos muy de diminutivos y de comer, así que es normal que algunos estén guaixaets.
Ejemplo: Desde que te has casado te estás poniendo guaixaet. 