Photo: Marco Iacobucci Epp/Shutterstock

7 diferencias y 7 similitudes entre los aficionados de fútbol de México y los de Inglaterra

Reino Unido México
by Ricardo de los Ríos 8 May 2014
Diferencias
Aplausos decentes versus la chela voladora

En México, cuando nuestro equipo anota, es tanta la euforia que echamos nuestra chela a la multitud, sin importar cuánto hayamos tomado. En Inglaterra, los aficionados aplauden decentemente y en ocasiones, si se emocionan mucho, se llegan a dar el famoso choque de palmas conocido en inglés como “high five”. Si en México no estás dispuesto a mojarte en un estadio, no vayas. Solo recuerda que la cerveza tibia no existe.

Ruidos versus ópera

La gente en México grita, insulta, chifla, hace ruidos, pero casi nunca canta (a menos de que estemos muy emocionados y vayamos ganando y ahí sí, nunca falta el Cielito Lindo). En los estadios ingleses, tu equipo puede ir perdiendo por golpiza y aún así se puede escuchar a todo el estadio cantando al unísono, como si fuera un gran coro.

Comentaristas versus ¡¡comentaaaaaaariiiiiiistaaaaaas!!

Si no tienes la fortuna de asistir al estadio y te ves forzado a ver el juego desde tu casa, en México, esto es casi igual de emocionante. Los comentaristas gritan y se emocionan como cualquier fan y a veces hasta el pase más sencillo de un jugador a otro requiere de una detallada e intensa narración. En Inglaterra, después de un largo silencio se escucha, “Rooney… Van Persie… Rooney…” y luego más silencio… hasta que Rooney se la vuelve a pasar a Van Persie.

Chela versus té

En México los aficionados se asolean en el estadio mientras disfrutan de una chela, pizzas, jochos y hasta esa famosa sopita que está en todos lados. No sé si sea por el frío o por las cinco libras que cuesta la cerveza, pero en la isla al norte de Francia, los aficionados al football toman té y se calientan las manos con sus termos ardientes mientras comen un sándwich hecho en casa. Así es, además de inventar el fútbol, los ingléses también inventaron el famoso sandwich. Sabían que algún día necesitarían algo que comer durante los juegos.

Lluvia, tus manos frías como la lluvia…

En México, si alguna vez llega a haber un estadio vacío, le puedes echar la culpa a la lluvia. Si a los aficionados en Inglaterra no les gustara mojarse o les diera miedo el frío, los jugadores siempre jugarían en estadios vacíos.

Violencia en los estadios

Los ingleses se golpean entre ellos (¿Aún existen los hooligans o ya se autoeliminaron peleando?). En México, después de golpearse entre ellos, a los aficionados les gusta golpear a la policía.

Paparazzi prohibidos

Los jugadores ingleses son perseguidos constantemente por ejércitos de paparazzi. Pareciera que el inglés, además de no poder vivir sin su té, tampoco puede vivir sin ver a Beckham en falda o leer sobre los últimos injertos de pelo de Rooney o de sus visitas a las prostitutas. En México, quizá porque pasamos tantos corajes con los jugadores cuando están en la cancha, no nos interesa saber qué hacen afuera del estadio. Encontrar a un paparazzo que se especialice en futbolistas mexicanos es tan difícil como encontrar a un político honesto.

Similitudes
Los inventores del juego

Ambos pensamos que inventamos el juego. El juego de pelota maya obviamente vino primero y consistía en meter una pelota por un hoyo sin usar las manos. Quizá los ingleses, al enterarse de este gran reto maya, decidieron facilitarle un poco el proceso a los jugadores e hicieron el “hoyo” más grande y además, rectangular. Pero el verdadero genio no fue el que “inventó” el juego sino el flojo al que se le ocurrió poner una red atrás de la portería para no tener que ir por la pelota cada vez que se metiera un gol.

La ola mexicana

En ambos países hacemos la ola felizmente, y más cuando nuestro equipo va ganando. La diferencia es que en Inglaterra le dicen “The Mexican Wave” (La ola mexicana) y en México solo le decimos, “La ola”.

Emoción mundialista (¿O tristeza mundialista?)

Un proceso muy doloroso comienza cada cuatro años. Aunque siempre hay una tenue luz de esperanza, tanto aficionados ingleses como mexicanos tienden a ponerse bastante cínicos en cuanto a las posibilidades de su equipo de avanzar en el torneo, aceptando fácilmente que a partir del silbatazo inicial es solo cuestión de tiempo para que todo se derrumbe. Duele admitirlo pero muchos mexicanos escogen otro equipo con mayores posibilidades de llegar a la final para tener a quien irle durante el largo torneo (¡Vamos Brasil!).

David Beckham

En Inglaterra y en México aman a David Beckham. En Inglaterra, lo adoran completito y en México, solo sus cortes de pelo. Hoy en día, muchos mexicanos usan aún el corte semi mohicano de Beckham que movió al mundo hace varios años. Sin embargo, en Inglaterra ese corte de pelo pasó de moda desde que el Spice Boy jugaba en el Manchester United. México, es hora de cambiar de peinado. ¿Alguien se apunta para un corte “a la Cuau”?

Todos somos expertos

No importa si estás en el Estadio Azteca o en Old Trafford, siempre te va a tocar sentarte junto al carnal que le enseñó todo lo que sabe a Alex Ferguson o al Piojo Herrera. Esta persona hablará de estrategia, de táctica y de todo lo relacionado con ganar, durante los 90 minutos y sin parar. Entre corajes y gritos, te das cuenta de que este “profe” en efecto sabe lo que dice porque gane o pierda su equipo, te dice cada razón por la cual se dio el resultado que se dio, y todo, absolutamente todo, tiene sentido… claro, ¡después de varias chelas encima!

Siempre hay algo o alguien a quién culpar

En México, siempre que no pasamos a la siguiente ronda surgen varias teorías de conspiración para justificar nuestra falta de actitud y precisión y, por lo general, hay grandes sumas de dinero en juego. En Inglaterra, cada cuatro años tienden a culpar solo a un “jugador inútil”. “Hola, me llamo Wayne Rooney y pisé a un jugador en sus partes privadas cuando estaba en el piso y lo hice en frente del árbitro” (Alemania 2006).

Argentina

Así es, Argentina. Escuchar ese nombre dentro de un contexto futbolístico duele y mucho. Bello país, gente linda, pero híjole, ver esas rayas blancas y azules con el short negro nos traen muy, pero muy malos recuerdos tanto a los ingleses como a los mexicanos. Argentina es el país que dejó fuera a México de los últimos dos mundiales (2006 y 2010) y aunque Inglaterra le haya ganado más a los pamperos en este torneo (3 vs. 2), en realidad los aficionados solo recuerdan el mundial de México 86. Aquel 22 de junio, en cuartos de final, Maradona metió los que muchos consideran los dos goles más emblemáticos de la historia de los mundiales: el gol de “la mano de Dios” y el gol del siglo. Dos goles que siempre unirán a México con Inglaterra… y ambos con Argentina por el resto de la historia.