Resaca, chuchaqui, goma, guayabo, cruda… no importa cómo le digas ni en qué país estés, los efectos son los mismos y no hay nada peor que levantarse un domingo con la cabeza estallándote y con ganas de tomarte toda el agua del mundo (¡O al menos eso es lo que me han contado!). Por suerte, cada país tiene una comida especial para combatir los síntomas de una borrachera y devolverte la vida.
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8 recetas latinoamericanas que son un milagro para curar la resaca
1. Chilaquiles
¡Qué alce la mano el mexicano que no ha comido chilaquiles para aliviar la cruda! ¿No? ¿Nadie? Y es que éste es uno de las mejores comidas para cuando uno está pasado de copas porque el chile hace que segregues más saliva lo que ayuda a la digestión y a eliminar más rápido el alcohol. ¡Así que entre más picosos los pidas mejor!
2. Leche de tigre
Cuando sales de fiesta en Perú, no hay nada mejor que la leche de tigre para que los efectos del alcohol no te hagan daño. Es una mezcla bastante interesante que lleva lima, cilantro, ajo, cebolla, chiles, pescado, sal y pimienta. El sabor ácido de este platillo llena al cuerpo de energía y por eso es que los peruanos le tienen mucha fe.
3. Encebollado
Para los ecuatorianos (sobre todo para los guayacos) no hay mejor platillo para la operación resaca que un encebollado. Una sopa que se prepara con pescado, yuca, cebolla, tomate y cilantro. Créanme, yo soy testigo de que más de un borrachito en calidad de bulto ha logrado hacer el “4” después de pegarse un buen encebollado.
4. Fricasé
Esto muero por comer, aunque no tenga resaca se antoja muchísimo. Se trata de un guiso de cerdo con mote cocido, ají, comino, ajos molidos cebolla y pan molido. Los bolivianos le atribuyen a este platillo cualidades milagrosas y lo conocen como levanta muertos, por algo ha de ser ¿verdad?
5. Sancocho
Definitivamente las sopas son los platillos estrella para curar la resaca y por eso los venezolanos, panameños y dominicanos le tienen tanta fe al sancocho. Una sopa hecha con carnes, verduras y muchos condimentos.
6. Paila Marina
Me acuerdo que cuando vivía en México, tenía una amiga chilena que siempre al día siguiente de salir de fiesta y echarse unos tragos, decía que le urgía una paila marina. ¡Pobre de ella! Nunca la consiguió, pero cuando yo tuve la oportunidad de probarla, la entendí. Es buenísima para curar la resaca porque tiene una mezcla de mariscos, pescado, vino blanco, caldo de pescado y especias y se sirve bien caliente; y además se le atribuyen efectos afrodisíacos, ¿será?
7. Caldo de costilla
Y no podía dejar de lado al plato mata resaca de mis amigos colombianos, que lo comen después de tomarse uno que otro aguardientico. Se trata del caldo de costilla, una sencilla sopa que tiene unos buenos trozos de costilla de res, papas, cilantro y tallos de cebolla. ¡Dicen que reanima hasta al más débil!
8.
Tomar la misma cantidad de agua antes de irse a dormir que el alcohol consumido durante la fiesta, acompañado de dos aspirinas y, si esto no funciona, seguir el viejo consejo del abuelo: “la mejor solución para no sufrir de resaca es seguir emborrachándose”.