9 delicias que tienes que probar en Guadalajara

by Diana García 12 Feb 2016

1. La intensidad de una torta ahogadas
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Seguramente es el platillo más típico y representativo de la ciudad. Está hecho con un birote salado -un pan típico de la región que es más grueso y duro por fuera pero suave por dentro- untado con frijoles refritos y relleno de carnitas. El toque distintivo es que una vez preparada, se sumerge completamente en salsa roja, por lo que normalmente es muy picante. Acompáñala con cebolla rebanada y limón para completar la experiencia. La torta ahogada es una delicia que te ayudará a sudar la cruda por completo.

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2. Una deliciosa carne en su jugo.

Quién es capaz de resistirse a un delicioso consomé de carne de res muy picadita y asada en su propio jugo con frijoles y trocitos de tocino doraditos. Este es otro de los platos que sólo vas a encontrar en Guadalajara, así que ya sabes… ¡ponlo como requisito de tu próxima visita! Se come con salsita, limón, cebolla y cilantro. También puedes pedir unas cebollitas cambray y unas ricas tortillas hechas a mano para complementar la experiencia.

 

3. Por supuesto, la tradicional birria.

Birria puedes encontrar por muchos rincones de México, pero todos sabemos que la birria tapatía es la mejor del mundo. Este plato está hecho con carne de chivo, cabra o borrego, aderezado con multitud de especias y chiles. La costumbre indica que debe cocinarse en un horno bajo la tierra cubierto con hojas de maguey, con lo que la carne adquiere un sabor especial. La birria la puedes encontrar en dos presentaciones: caldo o tacos. Escoger tu presentación favorita… ¡eso sí puede ser un problema!

 

4. Un mexicanísimo pozole.

El pozole típico de Guadalajara es normalmente rojo o blanco, preparado con el típico grano de maíz, carne de puerco y servido con lechuga, cebolla, limón, rábanos, orégano y una buena salsa bien picosa. La mejor opción para una cena sustanciosa y reconfortante. Acompáñalo con unas tostadas doraditas y condiméntalo a tu gusto.

 

5. No puedes levantarte de la mesa sin pedir una jericalla
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El postre perfecto y el dulce más típico de Guadalajara. El poco conocedor podría confundirlo con un flan, pues está hecho de leche, huevos, vainilla, canela y azúcar, pero la similitud termina cuando pruebas la primera cucharada. Su textura suavecita, el sabor dulce con ligeros toques de vainilla y lo quemadito de arriba contrastando con el resto del postre, lo hace una experiencia tapatía exquisita y obligada. La jericalla es tan famosa, que la podrás encontrar en cualquier restaurante de comida típica e incluso en las taquerías.

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6. O refrescarte con un rico raspado.

La opción perfecta para un postre refrescante durante el calor del verano. Si nunca los has probado, los raspados están hechos de hielo rallado cubierto de ricos jarabes dulces de tus sabores favoritos… ¡simplemente deliciosos! Puedes encontrar puestos de raspados por toda la ciudad, aunque los de Morán en Chapalita son los más famosos… ¡por algo será!

 

7. El tequilita nunca estará de más.

Esta bebida icónica de México tiene su origen en Jalisco, por lo que Guadalajara es uno de los mejores lugares para probarlo. El tequila es un destilado que proviene del agave azul y puedes encontrar varios tipos: blanco o plata, oro, reposado, añejo y extra añejo. Recuerda que “nada con exceso, todo con medida” y ¡salud!

 

8. Un tejuino para una tarde de calor.

El tejuino es una refrescante bebida fermentada a base de maíz y piloncillo. La puedes consumir sola o acompañada de nieve de limón, limón y sal. Está disponible por toda la ciudad, en especial durante los días de más calor, cuando los carritos de tejuino se multiplican para el deleite de todos los tapatíos.

 

9. Y qué mejor forma de terminar esta lista que con una buena cazuela.

La cazuela o cazuela voladora es una deliciosa bebida cítrica muy tradicional de Guadalajara. Está preparada con toronja, limón, lima, naranja, refresco de toronja, agua mineral y, por supuesto, ¡tequila! El sabor y frescura de este coctel te harán sentirte en la gloria. Disfrútala en presencia de un buen mariachi y con buena compañía. ¿Ya se te antojó venir a Guadalajara? 

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