Dos ejemplares de gato andino (Leopardus jacobita) han sido identificados en la Reserva Natural Villavicencio en Mendoza, Argentina. Gracias a la instalación de cámaras trampa en varias zonas de la reserva se ha logrado obtener un registro visual de una de las especies de felino más amenazadas y elusivas del planeta. Lo anterior se logró gracias a los esfuerzos colaborativos de la Alianza Gato Andino (AGA), la Dirección de Recursos Naturales Renovables de Mendoza y la Reserva Natural Villavicencio. Este es el primer avistamiento de gato andino en Villavicencio desde 2008.
Photo: Julia Tudosi/Shutterstock
En Argentina celebran la aparición del gato andino, el felino más amenazado del continente
Gracias al trabajo colaborativo entre el sector privado, gubernamental y una organización internacional sin fines de lucro, se identificaron claramente dos individuos de gato andino. El reconocimiento de estos animales reafirma la presencia de la especie en Mendoza. pic.twitter.com/v3a8HZrUY6
— Humberto Mingorance (@MingoranceH) January 12, 2020
Este gato es el felino más amenazado del continente americano y se encuentra en la lista roja de la Unión Internacional por la Conservación de la Naturaleza (UICN) desde 2002. Se distribuye en las zonas altas entre Argentina, Perú, Bolivia y Chile, y se estima que existen menos de 2500 individuos en la naturaleza. Es un gatito de tamaño pequeño —similar a un gato doméstico—, tiene pelaje gris con franjas oscuras y es el carnívoro más amenazado de Los Andes. El gato andino es tan difícil de observar que hasta 1980 sólo existían dos fotografías documentando su existencia.
El esfuerzo por localizar al gato en la Reserva Nacional Villavicencia se redobló a mediados de 2019 luego de que un turista reportara un avistamiento fortuito. Según la Alianza Gato Andino, esta población de gatos andinos “aparece como genéticamente única y es fundamental conservarla ya que puede proveer herramientas para la permanencia a largo plazo de la especie”. La única ocasión en la que se había documentado uno de estos felinos en Villavicencio fue en 2008 y nunca se pudo comprobar si se trataba de un animal residente o uno que iba de paso.
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Los esfuerzos por conservar al gato andino resultan especialmente difíciles ya que se trata de una especie con una distribución restringida en cuatro países distintos. Es por esto que la labor de organizaciones no gubernamentales que actúen a nivel internacional resulta de suma importancia. AGA es una organización que lleva veinte años dedicada a la investigación, conservación y divulgación de este extraño animalito. 
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