1. Creer que las distancias son cortas.
Si bien es cierto que Europa tiene una extensión territorial menor a la de América Latina, no significa que las ciudades que quieras visitar están cerca una de otra. Tratar de pasar por 8 países en 15 días se traduce en apuros y cansancio. Tu viaje consistirá en subir del bus, bajar, dormir poco, ir y tomarse la foto icónica, volver al bus, al avión, al tren… a muchas horas de camino y pocas de relax.
Solución: como “el que mucho abarca, poco aprieta”, si tienes pocos días de vacaciones elige los sitios que más interés tengas en conocer y dedícales dos o tres días a cada uno, por lo menos. Recorrerás menos ciudades, pero disfrutarás más. Ahora, si tienes tiempo de sobra, entonces tómalo con calma y aprovecha conociendo también los pueblos, lejos de las grandes ciudades.