Preservar un espacio natural ya sabemos que es de suma importancia para proteger su ecosistema y para no modificar el nuestro. Es decir, para que no repercuta también en nuestra supervivencia como ser humano. Para ello, las distintas administraciones públicas han creado a lo largo de los años distintas figuras de protección que hemos de tener en cuenta siempre que visitemos un espacio protegido. Hay muchos más, pero estos son 10 de los espacios naturales protegidos en Almería.
Photo: Juan Antonio Martinez/Shutterstock
10 espacios naturales protegidos que no imaginabas en Almería
1. Parque Natural Marítimo-Terrestre de Cabo de Gata-Níjar
Fue el primer espacio marítimo-terrestre protegido en Andalucía y esta declaración tuvo lugar en el año 1987. Es uno de los espacios naturales españoles que cuenta con mayor número de figuras de protección por la diversidad geológica, antropológica, ecológica, histórica y paisajística que presenta. De origen volcánico, es además uno de los paisajes más áridos de Europa. Incluye diferentes reservas protegidas tanto marinas como terrestres únicas en el continente. Con 37.500 hectáreas terrestres y 12.012 hectáreas marinas, es un lugar predilecto tanto para almerienses como visitantes, que lo eligen por sus playas y paisajes.
2. Paraje Natural del Desierto de Tabernas
Ocupa una extensión de 280 kilómetros cuadros al norte de la capital y es otro de los entornos almerienses que cuenta con gran número de protecciones por su orografía y geomorfología, por sus endemismos locales de flora y fauna, y por ser un paisaje cultural en el que la humanidad ha ido dejando su huella a lo largo de la historia. Además, es el único desierto de Europa declarado como tal y es el mayor plató del western y del spaghetti-western de todos los tiempos.
3. Paraje Natural de Sierra Alhamilla
Paraje Natural desde 1989 con una superficie de 8.500 hectáreas. Linda con el Paraje Natural del Desierto de Tabernas, de ahí que muchos confundan ambos entornos naturales, aunque este presenta algunas diferencias, sobre todo en su orografía y ecosistemas. La creación de este sistema montañoso tiene su origen también en la actividad volcánica y cuenta además con otras certificaciones de protección por su relevancia ecológica. Sus aguas termales, que llevan brotando hacia la superficie desde el interior de la tierra desde hace siglos, han hecho que diferentes civilizaciones, como la islámica, hayan utilizado estas montañas como lugar de residencia. Aunque también es escenario de películas como, por ejemplo, Exodus, y de multitud de anuncios de televisión, este paraje no está tan desarrollado turísticamente.
4. Paraje Natural de Alborán
Este paraje natural está compuesto por la isla de Alborán, el islote de la Nube y algunas reservas marinas protegidas. La ONU fue quien reconoció por primera vez su importancia en 2001, cuando lo declaró Zona de Especial Importancia para el Mediterráneo (ZEPIM). La isla de Alborán, la más grande con 0,0712 kilómetros cuadrados y con forma plana, tiene su origen hace 20 millones de años sobre una caldera volcánica submarina. Y aunque desde la antigüedad ha habido personas en este entorno, en la actualidad no es un sitio con acceso para turistas y en él conviven solo unos pocos militares españoles. Pero, aun siendo un espacio pequeño y sin grandes rasgos orográficos, presenta algunos endemismos de fauna y flora. También, algunas especies de aves utilizan este espacio como lugar de paso migratorio.
5. Paraje Natural de Karsts en Yesos de Sorbas
Es uno de los complejos kársticos más interesantes e importantes de Europa y de los mejor conservados en el mundo. Está compuesto por cuevas, cañones, dolinas y geodas que se han formado a lo largo de los años por la erosión de las aguas subterráneas del río Aguas y por las lluvias. Fue declarado paraje natural en 1989 y cuenta con más de 1.000 cavidades excavadas en el yeso. Algunas de ellas abiertas al público.
6. Monumento Natural del Arrecife Barrera de Posidonia
Este arrecife con plantas de Posidonia —de 108,01 hectáreas— se sitúa entre la costa de Roquetas de Mar y la de Aguadulce y fue declarado Monumento Natural en 2001. Se trata de una de las joyas del Mediterráneo: contribuye a la fijación de los sedimentos del suelo y actúa como barrera de protección contra la pérdida de la superficie de las playas, de ahí su importancia de conservación. Además, este enclave marino sirve de lugar de refugio, de reproducción y de alimento de muchas especies de animales submarinos. Aquí se puede hacer submarinismo y ofrece al visitante paisajes únicos y de gran singularidad.
7. Paraje Natural de Punta Entinas-Sabinar
Paraje Natural y Reserva Natural es este espacio protegido, entre otras figuras de protección. Cuenta con 1.944,76 hectáreas de paraje y con 785 hectáreas de reserva distribuidos entre los términos municipales de Roquetas de Mar y El Ejido. Se compone de numerosas dunas, charcas, salinas y playas arenosas que dan cobijo a distintos hábitats de flora y fauna, entre ellas al flamenco rosado o común, que utiliza distintos entornos naturales de Almería en su paso migratorio. Algunas de estas especies se encuentran en peligro de extinción y en la actualidad este entorno se encuentra fuertemente sometido por la construcción de numerosas urbanizaciones cercanas e invernaderos del Campo de Dalías.
8. Reserva Natural de la Albufera de Adra
Otro lugar protegido que es zona de paso migratorio y de nidificación de diferentes aves. También alberga distintos hábitats de animales acuáticos y de reptiles. Está compuesta por la albufera Nueva y la albufera Honda y una tercera no incluida en la reserva llamada laguna Cuadrada. Este lugar está especialmente protegido, por lo que visitarlo requiere de un permiso específico. La proliferación de los invernaderos en la zona está haciendo que se vea perjudicada, por lo que la calidad de sus aguas se ha reducido en los últimos años.
9. Monumento Natural de la Isla de San Andrés
En el municipio de Carboneras está este pequeño islote de escasas 7 hectáreas de superficie, pero de gran importancia ecológica debido a la riqueza de sus fondos marinos. Además de contar con la ya mencionada pradera de Posidonia, es un importante lugar de supervivencia y de alimento de distintas especies de animales marinos. Desde que fue declarada Monumento Natural en 2003, este entorno natural protegido se ha ido recuperando año a año. Aquí el submarinismo también está permitido.
10. Parque Natural de Sierra María-Los Vélez
Al norte de la provincia de Almería se ubica este entorno natural que cuenta con distintas protecciones, no sólo la de Parque Natural, por su rico patrimonio cultural, su patrimonio arqueológico y por los distintos hábitats de flora y fauna que lo constituyen. La huella humana aquí tiene especial relevancia, y podemos encontrar desde pinturas rupestres hasta castillos y legado medieval. El clima difiere del resto de la provincia, es mediterráneo de montaña por la ubicación y por la altitud en la que se encuentran algunos puntos de este macizo montañoso. Se extiende por los municipios de Chirivel, María, Vélez-Rubio y Vélez-Blanco ocupando una superficie de 22.562 hectáreas.
Otros espacios protegidos en Almería son el Monumento Natural de la Isla de Terreros e Isla Negra, el Monumento Natural de Piedra Lobera, el Monumento Natural de Sabina Albar, el Monumento Natural de Cueva de Ambrosio, el Parque Periurbano de Castala y el Parque Natural y Nacional de Sierra Nevada. 